La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desmantelado seis invernaderos tipo indoor con 1.654 plantas de cannabis en un edificio ocupado de Fuente Alamo y ha detenido a once personas como responsables de los mismos.

Según han informado fuentes de este cuerpo, las actuaciones se iniciaron el pasado marzo, cuando la Guardia Civil fue alertada de una alteración del orden público en las inmediaciones de un edificio de la localidad de Fuente Álamo, en el que alrededor de la mitad de sus viviendas se encuentran ocupadas ilícitamente.

El altercado se originó cuando la empresa propietaria de los inmuebles intentó recuperar las viviendas y medio centenar de personas que ocupaban parte del edificio se enfrentó a los vigilantes de seguridad para evitarlo.

Hasta el lugar se desplazó la Benemérita y durante la actuación, los guardias civiles hallaron indicios de la presencia de diversos cultivos ilícitos de marihuana en las viviendas ocupadas y en las zonas comunes de los edificios, así como cableado eléctrico por los suelos que se introducía en los portales de las viviendas.

El Equipo de Investigación de la 5ª Compañía, en Cartagena, inició la correspondiente investigación. Los especialistas se centraron en el lugar de los hechos, donde realizaron una exhaustiva inspección técnico-ocular que les permitió comprobar que en cada una de las escaleras de los edificios existían viviendas utilizadas para el cultivo de cannabis.

Los investigadores pudieron comprobar que en cada planta existían viviendas que estaban siendo utilizadas para cultivo tipo indoor de cannabis, un total de seis, que, además, tenían una conexión ilícita a la red eléctrica.

Los agentes registraron los seis inmuebles donde encontraron invernaderos de marihuana con un total 1.654 plantas, ya en estado de floración, que fueron incautadas junto con productos para el cultivo y todos los dispositivos de iluminación, calefacción riego y ventilación que componían los invernaderos.

Un total de once personas han sido detenidas por pertenencia a grupo criminal, delitos contra la salud pública –por cultivo o elaboración de drogas– y defraudación de fluido eléctrico.