El “retraso extremo en las actuaciones” del Ministerio de Transición Ecológica (MITECO) para la construcción de las presas de laminación de Béjar, Nogalte y Torrecilla y el encauzamiento de la rambla de Biznaga ha agotado la paciencia del ayuntamiento de Lorca.

El "estancamiento" de esos proyectos de lucha contra las riadas en la huerta lorquina ha llevado al consistorio a personarse en todos los expedientes del ministerio para poder fiscalizarlos e impulsar que se agilicen.

Lo ha anunciado el alcalde, Fulgencio Gil, que se ha quejado de “los continuos errores por parte de la Confederación Hidrográfica del Segura” desde que los proyectos comenzaron a anunciarse tras las riadas de 2012.

Gil ha dicho que el ayuntamiento no sólo solicita la documentación sobre el estado de los expedientes, sino que insta “a que se agilicen cuanto antes las actuaciones necesarias y se comprometa la financiación de forma urgente para estos proyectos”, que son claves para “poder solucionar de una vez por todas un problema que lleva años teniendo en vilo a los vecinos de Campillo, Purias y Torrecilla”.