El PP ha pedido al Ayuntamiento de Lorca que retome las negociaciones para desbloquear el desarrollo del convenio urbanístico que preveía la construcción de 600 viviendas en el solar de la vieja subestación eléctrica de La Viña, aunque propone un cambio de modelo más sostenible que permita levantar una manzana urbana para vivienda joven y suelo dotacional.

En 2003 la unión de promotores urbanísticos de la ciudad Uneprocon, Iberdrola y el ayuntamiento suscribieron un convenio urbanístico según el cual los promotores compraban a la eléctrica los terrenos de la subestación, unos 25.000 metros cuadrados, para construir un residencial de 600 viviendas repartidas en nueve edificios de 12 plantas y espacios verdes.

Diecisiete años después el convenio no ha llegado a desarrollarse por la crisis inmobiliaria y diferencias de los promotores con Iberdrola, que derribó la subestación en el año 2018.

Ahora el PP propone que sea el ayuntamiento el que impulse la ejecución de ese convenio “con el objetivo de emprender desarrollo urbanístico responsable, ordenado y socialmente rentable de esta zona de la ciudad”, ha dicho la concejala Rosa Medina.

Su partido propone amplias zonas verdes, construcciones modernas y sostenibles y reservas de terreno para acoger instalaciones socioculturales como salas de estudio y bibliotecas, de modo que el solar actual se convierta en punto de integración de los barrios de La Viña y San Antonio.