El Real Murcia vuelve a tropezar en la misma piedra. El equipo de Mario Simón, que durante gran parte del partido fue mejor que su rival y controló el partido, acabó cayendo, en otra acción a balón parado, frente al líder CD Castellón en Castalia. El exceso de conservadurismo de los visitantes en la segunda parte motivó que los castelloneneses encerrarán al Murcia en su área provocando opciones de gol.

La defensa se mostró muy segura durante toda la tarde pero en la recta final, minuto 80 de juego, llegó el despiste de cada partido que aprovechó Óscar Gil, en una nueva acción a balón parado, para hacer el 1-0 que no hacía justicia a lo que estaba sucediendo sobre el terreno de juego pero el conformismo grana le llevó a la derrota. Los murcianistas encajaron su quinto gol de forma consecutiva en una acción parecida, demasiados errores parecidos que motivan que se vaya descolgando en la tabla clasificatoria y se sitúen a ocho puntos del líder.

El partido de Castalia arrancó con un Castellón dominador aunque sin llegar con peligro a la portería visitante. Los porteros, Alfonso Pastor y Miguel Serna, apenas tuvieron trabajo y las defensas se imponían a unos delanteros que estaban demasiado sólos en las áreas respectivas. Con el paso de los minutos Pablo Ganet tomó el control del partido para convertirse en el director de orquesta y marcar el ritmo del partido aunque las ocasiones no llegaban. Al descanso se llegó con empate a 0 pero con la sensación de que el Real Murcia, superior en muchas fases, estaba más cerca de poder hacerse con la victoria.

Al regreso de los vestuarios los de Rubén Torrecilla, técnico local, dieron un paso adelante para sumar los tres puntos, con una afición volcada en un partido con un ambiente más propio de una categoría superior. Por el contrario los visitantes se metieron atrás. El Castellón encerró al Real Murcia y comenzaron a llegar las ocasiones de gol. La más clara acabó con un lanzamiento al poste, con Miguel Serna ya batido. Los granas respondieron pronto cuando Loren Burón obligó al portero a realizar una gran intervención. Al borde de la hora de partido Mario Simón decidió dar entrada a Pedro León para sustituir a un Burón que estaba siendo el jugador más peligroso visitante. El cambio no tuvo el efecto deseado y los locales pusieron cerco a la portería de Serna hasta que llegó el gol, que al final sería el de la victoria.

A falta de diez minutos el Real Murcia intentó salir de la cueva para buscar el empate. Estos útimos minutos se convirtieron en un querer y no poder con lo que al final del partido se llegó con un resultado que no hace justicia a lo sucedido en el terreno de juego aunque el cuadro grana pagó en exceso su conservadurismo y los extraños cambios de su entrenador.

La parte más atractiva de la tarde estuvo en las gradas donde las aficiones de ambos conjuntos dieron un ejemplo en un partido en el que Castalia registró mejor entrada que muchos campos de la liga Smartabank.

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