Puede haberte pasado inadvertido, es muy difícil que lo hayas notado porque vives en ella, pero te lo digo yo: la Tierra se está oscureciendo. La cantidad de luz solar que nuestro planeta refleja hacia el espacio ha disminuido mucho durante las dos últimas décadas, algo que podría tener graves consecuencias en el clima global. Esta es la sorprendente conclusión de un estudio recién publicado en 'Geophysical Research Letters' por un equipo de investigadores del Big Bear Solar Observatory, en California, la Universidad de Nueva York, el Instituto de Astrofísica de Canarias y la Universidad de La Laguna

Sin duda un tema fascinante que no podemos dejar de tratar en esta sección tan exitosa que es La Esquina del Misterio de Fin de Semana con Cristina. Los científicos obtuvieron estos datos midiendo el tenue resplandor, causado por el brillo de la Tierra, que se puede observar en las zonas oscuras de la Luna creciente. Y hemos acudido a un experto para nos lo explique. José Manuel Nieves, periodista de ABC especializado en Ciencia y Tecnología y autor de varios libros de divulgación, explica que “la reflectividad nos permite ver otros cuerpos oscuros por la luz que refleja la luz del sol, el albedo. La Tierra normalmente refleja hasta un 30 % de la luz solar que recibe, no todas las superficies son igual de reflectantes, el hielo mucho más que la tierra. En este estudio se han dado cuenta de que la cantidad de luz solar que reflejamos ha disminuido mucho en los últimos 20 años y sobre todo en los últimos 3 años”.

¿Es preocupante? “Si reflejas menos luz solar es que estás absorbiendo más calor. Toda esa luz se convierte en calor, eso contribuye al calentamiento de la tierra. Los investigadores dicen que como solo llevan 20 años no hay datos suficientes para saber si esto es una tendencia que va a ir a más o un episodio que va a ir a más. Si es tendencia es muy preocupante. Cada metro cuadrado de la tierra absorbe medio vatio más de energía que antes, se calienta bastante más”, detalla José Manuel, que añade que “la culpa de esto es un excesivo calentamiento de las zonas costeras de las américas, y tiene toda lógica. Produce que haya menos nubes bajas, que reflejan mucho la luz, y esa luz llega al mar y el mar absorbe menos. Es un círculo vicioso. Si a eso le sumas que los hielos están reduciendo superficie, produce más calentamiento de las aguas que retroalimenta que cada vez que la tierra absorba más”, finaliza.