La colaboradora de Fin de Semana, Carmen Lomana, reaccionaba este sábado tras enterarse de lo que ocultaba el matrimonio de Bill y Melinda Gates tras casi tres décadas juntos. Lo hacía en su sección de COPE junto a Cristina López Schlichting, donde comentaban que la empresaria percibirá 1.2 billones de dólares tras la separación, teniendo en cuenta que su ya ex marido es el fundador de la compañía Microsoft, lo que le ha catapultado en las listas de los hombres más ricos del planeta.

Y es que la fortuna total de Gates es de unos 124.000 millones de dólares, según ‘Forbes’. Era el empresario quien anunciaba la ruptura a través de un comunicado oficial en redes sociales: “Seguimos compartiendo la fe en esa misión y continuaremos nuestro trabajo juntos en la fundación, pero ya no creemos que podamos crecer juntos como pareja en esta próxima fase de nuestras vidas”, anunciaba.

El secreto del matrimonio de Bill y Melinda Gates

Tal y como se ha conocido esta semana, Gates conoció a su mujer, Melinda, hace mucho tiempo, pero antes ya estaba con su novia con la que se va de vacaciones todos los veranos. “Antes de casarse con Melinda, le avisó que todos los veranos se iban a descansar a una casita, pero ella lo aceptó por “entereza intelectual”, comentaban los colaboradores de Fin de Semana.

Un arreglo que tuvo lugar en 1994, cuando el empresario llevaba tiempo pasando los días libres con la que era su ex pareja, Ann Winblad y que, casualmente, ahora está felizmente casada. “Cuando estaba solo pensando en casarme con Melinda, llamé a Ann y le pedí su aprobación” llegó a reconocer el dueño de la empresa informática.

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La reacción de Lomana

“¡Pero mira a Bill Gates, con la pinta de atontadillo que tiene, de buenecillo y mira cómo nos ha salido!” exclamaba la socialité sin poder contenerse ante la historia. “Y feo, sí, sí”, respondía a los comentarios de Cristina López Schlichting, que también era contundente sobre el asunto: “A mí me dice que tiene una novia en una cabaña y le van dando puerta”.

Una historia que sobrende a Carmen Lomana, que destaca que el matrimonio entre Bill y Melinda era de apariencia normal, a pesar de la fortuna. “Y además los dos no vivían la típica vida multimillonaria, eran los dos muy sencillos. Una vida muy entregada a las obras sociales” “¿Y la novia también hereda? Hay que ver si le ha dejado la choza en la que se reunían...” bromeaba la presentadora de Fin de Semana con los colaboradores.

“¿Imagináis qué contradicción? Casarte con alguien que te dice que los fines de semana se va con otra” concluía la protagonista de 'La Hora Lomana', que no salía de su asombro ante la revelación.