La historia de Rebecca Kiessling es un relato brutal de supervivencia. Su madre biológica le dio a luz a raíz de un embarazo fruto de una violación y le entregó en adopción. Ella no supo nada de su verdadero origen hasta que cumplió los 18 años, poco antes de decidir que llegaría el momento de conocer a que le gestó durante 9 meses, a pesar de ser a raíz de una experiencia tan traumática. Hoy, es una superviviente y una activista provida, y cuenta en Fin de Semana de COPE su historia.

La propia Rebecca escribe en sus redes sociales: “Mi crimen fue ser concebida por violación, la próxima vez que escuches a la gente de hablar de excepciones a la prohibición del aborto, piensa en mí, yo soy la excepción, ¿merezco la pena de muerte?”. Todo ello en unos días en los que se está celebrando el XXIII Congreso Provida, y donde la activista otorgará un discurso de superación en el que relata su historia.

“ME CONFESÓ QUE INTENTÓ ABORTAR TRAS LA VIOLACIÓN”

Rebecca asegura que su madre biológico se mostró “muy feliz” ante la perspectiva del reencuentro y que, incluso, le escribió una carta en la que confesaba todo lo que había ocurrido. Sin embargo, la activista revela que se sintió “señalada”, como si fuera “una diana”. “Le pregunté a mi madre sobre el aborto y me dijo que seguro que lo habría hecho si la legislación se lo hubiera permitido”.

“Me dijo que en dos ocasiones intentó llevarlo a cabo, y es lo más parecido en mi vida de una experiencia cercana a la muerte”, narra emocionada Rebecca Kiessling, ahora fundadora de la asociación SaveThe1, que ayuda a personas que nacen fruto de violaciones. “Yo soy una persona tan digna de vivir y ser amada como cualquier otra”, asegura emocionada a Cristina López Schlichting.

HABÍA SIDO VIOLADA POR SU PROPIO ABUELO

La madre de Rebecca no solo le confesó que había sido asaltada sexualmente por su padre biológico, sino que también había sido “previamente violada por su propio abuelo”. “Luché durante muchos año para aclarar cuál es mi identidad y mi valor, para demostrar que soy digna de vivir”. Rebecca estuvo sola muchos años hasta que descubrió a otra persona que había sido concebida a partir de una violación y fundaron SaveThe1.

A través de datos genéticos descubrió que su padre biológico aún vive y que nunca fue encarcelado por la violación a su madre. “Su familia me contó que muchas otras mujeres le habían denunciado por varias violaciones”.

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“QUE LOS VIOLADORES NO TENGAN DERECHO DE PATERNIDAD”

“Siempre he estado comprometida a ser una persona con coraje”, se define Rebecca. “He ayudado a muchas mujeres a las que represento gratuitamente y nos esforzamos en que los violadores no tengan el derecho a la paternidad legal sobre los hijos concebidos en esa violación”.

De hecho, cuenta que en este momento hay “cuatro mujeres embarazadas como resultado de sendas violaciones” en la asociación, y que han conseguido que “muchas personas se solidaricen”.

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