Este martes nos deja también la historia de Kevin Systrom. Quizá por su nombre no les suene de nada… pero seguro que conocen muy bien la aplicación de la que es padre… Instagram…

Este martes se cumplen 10 años desde que esta red social saludara al mundo como una plataforma para compartir fotos de planes con amigos, paisajes bonitos o platos de comida. Una década después, Instagram es mucho más que eso. Es el escaparate en el que millones de marcas y miles de influencers -que son los perfiles con más seguidores- deciden qué ropa se lleva, qué lugares se fotografían e, incluso, qué platos se comen…

Detrás de este gigante tecnológico está ahora Marck Zuckerberg, el creador de Facebook, que compró Instagram en 2012 por unos 1.000 millones de euros. Pero dos años antes… la mente privilegiada de Kevin Systrom es la que había ideado Instagram.

Este hombre nació en Massachussets, EEUU. Y durante su infancia tuvo varios hobbies que le marcaron para crear la red social. Desarrolló un juego de rol para el ordenador, probó suerte como DJ y, sobre todo, se apasionó por la fotografía. Algo que perfeccionó, años después, tras un invierno de estudio en Florencia donde aumentó su interés por la calidad de las imágenes…

Este hobbie se convirtió en una idea empresarial cuando Kevin tenían tan sólo 25 años. Tras unos meses trabajando para Google, el joven decidió crear una plataforma llamada Burbn en la que los usuarios pudieran compartir fotografías de los lugares en los que habían estado. Fue el germen de Instagram. El resto es historia…

Kevin consiguió un inversor que le prestó medio millón de euros y Burbn pasó a llamarse Instagram. En un año la red ya contaba con 6 millones de seguidores. Una historia de éxito de la que se ha escrito tan sólo la primera parte. Y de la que aún quedan muchos me gusta por dar…

Es la 'Historia del día' en 'Herrera en COPE'.