El Lunes de Pascua es un gran día para los cristianos, pues la iglesia celebra el denominado "Lunes del Ángel". ¿Y por qué se denomina así? Porque fue precisamente un ángel en el sepulcro, el que indicó a las mujeres que el Señor Jesús había resucitado. En esta jornada es muy típico degustar una mona de Pascua. Se trata de una tradición que pasa de generación en generación desde hace siglos. Carlos Herrera ha querido recordar en 'Herrera en COPE' el lugar en el que compraba de niño este delicioso dulce. ¿Quieres descubrir dónde? Escúchalo en el siguiente audio.

En concreto, Herrera le ha contado a 'El Pulpo' que recuerda que "de niño que iba a comprar la mona del padrino. El huevo de chocolate encima de la tarta de yema de la confiteria Font". Inmediatamente después, el director de 'Poniendo las Calles' ha asegurado, en evidente tono jocoso, que el comunicador siempre recuerda el nombre de aquellos lugares gastronómicos que se han convertido imprescindibles para él a lo largo de su vida.

El director de 'Herrera en COPE', de hecho, ha seguido explicando que esa confitería era una seña de identidad en Mataró. "Estaba todo cerca. Font, el churrero, unos 100 metros prodigiosos. Los que me escuchen en Mataró sabrán lo que estoy diciendo".

Esta no es la única vez que Herrera hace referencia a Mataró. Un ejemplo de ello es el siguiente: en un momento dato, con Alberto Herrera, contó que vivía en el "centro, en la Riera". Y fue más allá. Apuntaba que, en realidad, considera que creció más "en el barrio de Gracia, en Barcelona, que era el barrio-barrio".

¿Cuál es el ingrediente clave para que las torrijas queden perfectas?

Las torrijas son otro de los dulces imprescindibles de la Semana Santa que acabamos de dejar atrás. Sin embargo, si te resistes a decirles adiós, te decimos cómo puedes elaborarlas y que queden deliciosas. Antes que nada, debes saber que los expertos creen que el verdadero secreto para elaborar una buena torrija es el pan.

Si el pan es bueno, el 50% de la torrija está conseguida. El resto de ingredientes también tienen que ser buenos. Desde la leche fresca, los huevos, el azúcar, aceite... Una vez se tienen los mejores ingredientes, toca ponerse manos a la obra. Una vez las tenemos listas para freír, toca otro paso clave. Es crucial que el aceite tenga la temperatura adecuada. Porque si no lo está, nos podemos encontrar con que la torrija se quede a medias y sin hacer.

El reputado chef Ferrán Adrià propone la siguiente receta:

• 1 barra de pan del día anterior (preferiblemente de miga densa).

• 1 litro de leche entera

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• 200 g de azúcar

• La piel de 1 limón

• La piel de 1 naranja

• 1 rama de canela

• 4 huevos

• Aceite de oliva suave para freír

• Azúcar y canela en polvo para espolvorear

El primer paso es el de calentar, en una cacerola grande, la leche con la mitad del azúcar, la rama de canela y las cáscaras de limón y naranja. Lleva la leche a ebullición, luego retírala del fuego y deja que se enfríe un poco para que los sabores se mezclen.

Mientras, corta el pan en rebanadas de aproximadamente 2 cm de grosor y sumérgelas en la leche caliente durante unos minutos hasta que estén bien empapadas. Después, bate los huevos en un plato hondo lo suficientemente grande para remojar las rebanadas de pan.

Escurre ligeramente el exceso de leche de las rebanadas de pan y pásalas por el huevo batido, asegurándote de cubrir bien ambos lados. Calienta una sartén grande con suficiente aceite de oliva para freír las torrijas.

Fríe las torrijas en el aceite caliente hasta que estén doradas por ambos lados. Ve volteándolas con cuidado para que se doren uniformemente.

Una vez fritas, colócalas sobre papel de cocina para absorber el exceso de aceite. Mezcla el resto del azúcar con la canela en polvo en un plato y pasa las torrijas por esta mezcla, cubriéndolas bien por ambos lados. Y ahora solamente queda lo mejor....¡Disfrutar!