No siempre salen a la luz malas noticias. También las hay buenas. Esta vez hablamos del déficit comercial español, que se ha duplicado en 2022, y lo hemos analizado con Marc Vidal, analista económico de'Herrera en COPE', en su 'Salida de Emergencia'. "Resulta que las exportaciones de España crecieron un 23% en 2022, hasta alcanzar por cierto una cifra récord de 389 mil millones de euros, eso sería lo bueno. Lo que pasa que, aunque este incremento sea una buena noticia, no ha sido suficiente para impedir que el déficit comercial se duplicara hasta llegar a los 68 mil millones de euros, y ese dato es muy relevante", comenzaba explicando el analista.

¿Qué es el déficit comercial y qué implica que se duplique?

"Pensemos que el déficit comercial es la diferencia entre las exportaciones y las importaciones netas de un país. De ahí que se representa, o por lo menos representa bien, el valor de bienes y servicios que vendes al resto del mundo y se le restan el valor de lo que compras. Tener déficit comercial significa, simplemente, que estás comprando más al exterior de lo que estás recibiendo a cambio. Pero, si miramos al detalle esta métrica hay elementos para el optimismo, básicamente porque nuestro déficit se debe, en gran parte, a la subida del precio de las importaciones energéticas. De hecho, este segmento representó el 77% del déficit global. Algo que tarde o temprano deberá remitir", señalaba.

Las exportaciones baten récords

Una buena noticia es que las exportaciones han batido récords. "Eso también es una gran noticia. Resulta que, a pesar de duplicar el déficit comercial, el sector exterior llegó a cifras inéditas, y eso es una fortaleza. De hecho, han sido tan determinantes las exportaciones, que se han convertido en el agente responsable del crecimiento de la economía española en 2022, que fue de un 5,5%. Fundamentalmente porque el sector exterior representó, nada más y nada menos, que un 42% del PIB. Y, ojo a esto porque, eso quiere decir que nuestros precios son competitivos todavía a pesar de la inflación, y las empresas españolas han sido capaces de capear los efectos de la guerra en Ucrania, buscar nuevos mercados y localizar proveedores de materias primas tras las sanciones impuestas a Rusia", argumentaba.

"Por eso hay que cuidar el único motor que tenemos ahora mismo en marcha. La economía de un país es como un avión de cuatro motores: uno es la inversión privada, otro es el consumo, un tercero es el gasto público, el cuarto son las exportaciones... Pues debemos de cuidar las empresas que exportan y no castigarlas con más presión fiscal, permitiendo que así puedan invertir en innovación y empleo. Se tiene que tener mucho cuidado porque a pesar de ese récord de exportaciones, y que el comercio aumentó en casi todas las regiones del mundo excepto, por cierto, en Rusia, Ucrania, China y Argelia, lo grave sigue siendo que estamos ante el mayor déficit comercial desde 2009, y eso es importante. Porque cuando el déficit comercial aumenta, en realidad, es que la riqueza es lo que disminuye. Puede que se incremente la deuda y se cierre, provisionalmente de esta manera, la 'Salida de Emergencia'", sentenciaba Marc Vidal.