Helena Maleno lo tiene claro: "Si tengo que ir a la cárcel por defender el derecho a la vida, iré". Así de rotunda se ha mostrado esta periodista defensora de los Derechos Humanos, activista en Tánger de la Asociación Caminando Fronteras, que ha sido llamada a declarar esta semana por la justicia marroquí. En ese país investigan si la española ha incurrido en un delito de trata de personas, algo que Maleno aclara: la acusan de "llamadas a Salvamento Marítimo para que no mueran personas en el mar".

De hecho, en España este caso se ha archivado. La activista española ha defendido en 'La Linterna de la Iglesia' que su trabajo consiste en "facilitar el acceso a derechos a personas que transitan por las fronteras". Maleno volverá a declarar ante los tribunales marroquíes el próximo 31 de enero. Ella espera que todo esto acabe cuanto antes porque "las verdaderas víctimas de esto son las compañeras y compañeros migrantes".

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El día anterior al primer interrogatorio centenares de personas, muchos de ellos migrantes, se concentraron en la catedral de Tánger para rezar por Maleno. "Fue maravilloso, he llorado lo más grande", ha confesado la defensora de los Derechos Humanos.

Crítica con Europa

La activista ha señalado que "Europa está perdiendo la dignidad. Ya no es la Europa de los Derechos Humanos, es la del negocio, las mercancías y el dinero". Por eso, Maleno ha indicado que "tenemos que mantener el tipo, nuestras democracias se ahogan en el Mediterráneo, y tenemos que defenderlas con uñas y con dientes".