Ya estamos en campaña electoral. Y es que en España siempre estamos en campaña electoral, cuando no es por una cosa es por otra. Dentro de un mes, el 13 de febrero, elecciones en Castilla y León.

Tres puntos de vista, tres ángulos desde donde enfocar la jugada a 32 días de esas elecciones. Lo primero es que si Mañueco gana como lo hizo Isabel Díaz Ayuso, el golpe encima de la mesa de Pablo Casado puede resultar muy interesante. Eso va a hacer que Pedro Sánchez aguante lo indecible hasta el último minuto, pero en cualquier caso ahí estaría el resultado.

Segundo. Mañueco, ni qué decir tiene, pilló en fuera de juego al resto de competidores. A Ciudadanos, porque poquito a poco se siguen suicidando cada uno como quiere; los socialistas y Podemos, es decir, el Gobierno, porque con el Garzón de turno ya tienen la campaña electoral hecha para el PP. ¡Con amigos así…! Y el fenómeno de los partidos regionalista como Teruel Existe. Por lo tanto, veremos como termina la jugada porque a expensas del resultado de Vox puede resultar interesante. Yo apuesto por algo parecido a lo de Ayuso, sólo que en Castilla y León.

Y tercera pata, porque este es el primer movimiento. La clave de bóveda de este año 2022 desde el punto de vista electoral en España son las elecciones andaluzas. Si se cumplen los pronósticos, Díaz Ayuso el pasado mayo y Fernández Mañueco el mes que viene, apuesto por elecciones andaluzas justo después de Semana Santa.

A partir de ahí, las cartas sobre la mesa: Pedro Sánchez con un Gobierno imposible, con unos socios que ni te cuento y el PP, si no vuelve a hacer otra como ha pasado en Madrid, en una posición cuanto menos interesante.