Este martes hemos conocido que los taxistas de Madrid han decidido desconvocar una huelga que ha durado 16 días, entre los que se han sucedido cortes de calles principales de la capital, numerosas manifestaciones en la Puerta del Sol y conflictos durante la celebración de la Feria Internacional FITUR. Una huelga que ha concluido sin que ninguna de las demandas de los taxistas haya fructificado en las negociaciones con la Comunidad de Madrid. Mañana, a las seis de la mañana, el taxi de Madrid "vuelve a las calles, vuelve a trabajar, pero no se rendirá", ha declarado el presidente de la Federación Profesional del Taxi de Madrid, Julio Sanz.

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha pasado por los micrófonos de La Linterna de COPE donde ha felicitado al colectivo del taxi por abandonar la huelga y marca la pauta de negociación de ahora en adelante en “sentarse y dialogar, pero sin dejar de trabajar”. Eso sí, haciendo balance de estos 16 días de paros, Garrido reconoce que la imagen del taxi se ha visto “muy dañada por un sector muy pequeño del colectivo”, y ha subrayado que se trata de un “sector muy querido” y que les ayudará a “recuperar el prestigio”.

Sobre la politización del conflicto, el líder del gobierno regional ha criticado que este movimiento solo proviene desde una “podemización de cierto perfil dentro de un sector que nunca se había manifestado de manera política”. En comparación con el acuerdo alcanzado en Cataluña para la precontratación de una hora para los VTC, Garrido ha lamentado que Ada Colau y Quim Torra “caminen hacia la Edad Media” con un acuerdo que ha culminado con “uno de los mayores ERE que se recuerdan” con la supresión de 3.000 puestos de trabajo. Por último, el presidente de la Comunidad de Madrid ha justificado su postura firme durante las negociaciones, señalando que no es cuestión de que “no tenga nada que perder”, sino que ha mirado “por los intereses de todos los madrileños”.