El domingo, en Brasilia, centenas de seguidores del expresidente brasileño Jair Bolsonaro invadieron la sede del Congreso Nacional, el Supremo Tribunal Federal y el Palacio del Planalto, sede de la Presidencia de la República, en una manifestación que pide una intervención militar para derrocar al presidente Luiz Inácio Lula da Silva. El grupo, que defiende tesis golpistas, superó una barrera policial y subió la rampa que da acceso al techo de los edificios de la Cámara de los Diputados y del Senado, y algunos entraron dentro de la sede legislativa.

Ángel Expósito se ha preguntado, en ‘La Linterna’ de COPE, por qué motivos calan los mensajes populistas en política. Se ha convertido en un fenómeno transversal que no solo se da en Latinoamérica, sino que lo vemos en democracias consolidadas como en Estados Unidos, la británica o aquí, en España. Ejemplos de ello son el asalto al capitolio tras la derrota de Donald Trump frente a Joe Biden; la salida del Reino Unido de la Unión Europea con un referéndum que acabó en ‘Brexit’ o el ascenso político de Pablo Iglesias.

Cómo vacunarse “frente a los demagogos de turno”

Alejandro Navas, sociólogo, ha explicado qué sucede en las sociedades para caer en las redes de los populismos: “Siempre ha habido demagogos. Lo que es novedoso es un contexto general que es la sociedad globalizada y esto provoca en mucha gente desconcierto porque el mundo se vuelve indescifrable, nos supera. Esto nos trae prosperidad por el comercio mundial, pero también provoca reacciones contrarias: en la economía se llama proteccionismo, en la política nacionalismo y en la cultura encontramos el fundamentalismo. Cuando uno no entiende algo se aferra a algo inmediato e identitario, por lo que el miedo hace a la gente violenta y agresiva. Un mundo globalizado promete bienestar, pero al conjunto. Hay gente que pierde y el perdedor sufre y esto es terreno abonado para los que dan respuestas sencillas a problemas complicados”.

Una clave fundamental para evitar caer en las soluciones fáciles y rápidas radica en la educación. ¿Nos estamos quedando con menos espíritu crítico? Alejando Navas, que es profesor de Sociología, advierte cómo “la clave para sobrevivir como personas es leer, porque esto lleva a pensar. Ya no digamos si una viaja y conversa con gente que no piensa como él. Abrir la mente, ser curioso e interesarse… de esta forma se estará vacunado frente a los demagogos de turno”.

El papel de los medios de comunicación

Ángel Expósito ha querido conocer cuál es el papel de los medios de comunicación en la proliferación de populismos. El sociólogo, aunque asegurando que es un tema complicado de analizar, considera que pueden favorecer a ello al perder independencia: “Los medios tradicionales pierden credibilidad porque se han vendido a intereses económicos, empresariales, ideológicos… la independencia va a menos y hay mucha presión. Es verdad que tenemos las redes, pero en la selva mediática es más difícil orientarse”, sentencia.