El divulgador tecnológico y colaborador de La Linterna, Mario Yañez, avisaba este martes en COPE de cuál será la tecnología que decante la “supremacía mundial” en el futuro, más allá del uso del ChatGPT, tan de moda en los últimos meses. Además, el experto ha querido tocar el tema de las restricciones desde China a exportar materiales como el galio o el germanio a Occidente o a Estados Unidos y los motivos que le llevan a tomar esta medida.

La restricción de galio y germanio

Según explicaba Yañez en La Linterna, la semana pasada, el Ministerio de Comercio de China anunció que a partir del 1 de agosto no se podrá exportar metal de galio o germanio ni más de una docena de sus derivados a Occidente, no solo EEUU, sin solicitar un permiso especial. “Si consideramos que son dos metales clave para la fabricación de chips y electrónica de todo tipo y que más del 95% de la producción de galio y el 67% de la de germanio se realiza en China pues ahí vemos el calado de guerra tecnológica”, matiza el experto.

Occidente controla la innovación, el diseño, el conocimiento y la fabricación avanzada y China controla las materias primas, las tierras raras y la industria de base y la cadena de suministro. “Ya tenemos servida la crisis”, ironiza Yañez.

La tecnología que decidirá la “supremacía mundial”

Pero, ¿por qué es tan importante la tecnología para alcanzar la supremacía mundial incluso en Defensa? Principalmente, porque, desde un Smartphone a un Caza de Combate, todo lleva chips. “Cada vez está más claro que la IA va a suponer una revolución tecnológica tan importante como lo fue Internet en los 90. No las chorradas que se hacen hoy con ChatGPT, pero en pocos años la verdadera IA va a impactar en toda la industria, en los servicios y por supuesto en la Defensa y en la Guerra”, apunta el experto.

“Quién tenga esta herramienta de su lado tendrá mejores industrias, mejores ejércitos, mejor inteligencia, etc. Pero para desarrollar estas nuevas tecnologías hace falta mucha investigación, mucha capacidad de procesamiento, es decir muchos chips y por ende, muchas materias primas y una absoluta autonomía o control de la cadena de suministros. Quien tenga todo esto tendrá la supremacía mundial, de ahí que la guerra está ahora en las fases iniciales de todo el proceso. Creo que quién pierda ahora se va a caer del tren durante muchos años”, concluye.

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La llegada de Broadcom a España

Asimismo, el pasado jueves el fabricante estadounidense de semiconductores Broadcom, anunció que ha elegido España para construir una fábrica de Chips apoyándose en el sistema de ayudas que el gobierno ha dotado a través del PERTE Chip, dotado con 12.500 millones.

Una empresa norteamericana que factura más de 30.000 millones de dólares y que emplea a más de 20.000 personas en todo el mundo. En el anuncio que ha realizado su CEO, Charlie Kawwas, explica que la inversión de Broadcom en España se dedicará a la construcción de una fábrica de gran escala de sustratos de back-end, con una inversión cercana a los 1.000 millones de euros y que sería la única en Europa. Pero, ¿qué son los back-end?

Uno de los procesos de construcción de los chips y los productos finales. Una vez realizado el diseño de los circuitos, los chips o semiconductores, se obtienen lo que se denominan obleas de circuitos. Luego hay que producirlos en cadena, cortarlos, procesarlos y probarlos para ensamblarlos como productos finales. Este proceso en cadena es lo que se va a realizar en esta nueva factoría.