La Linterna analiza lo que ha ocurrido durante la primera vuelta de las elecciones presidenciales en Argentina y cuáles pueden ser sus consecuencias. El actual ministro de Economía, Sergio Massa, represente de la coalición Unión por la Patria, contra todo pronóstico ha conseguido la victoria con un 36% de los votos. Un dato sorprendente teniendo en cuenta que cuatro de cada diez ciudadanos se encuentran en situación de pobreza, que en el país hay inflación interanual cercana al 140% y que el valor del peso va en caída libre. Sin embargo, la maquinaria del peronismo ha vuelto a funcionar, derrotando al máximo favorito en las encuestas: el candidato de “La Libertad en Marcha” Javier Milei.

Ningún candidato obtuvo al menos el 45% de los votos o más del 40% con una ventaja de más de 10 puntos. Por eso, tanto Massa como Milei, se tendrán que enfrentar en una segunda vuelta en noviembre. Una cita que ya calienta el propio Milei ante sus seguidores.

La candidata, la representante de “Juntos por el Cambio”, Patricia Bullrich, se ha desfondado con el paso de los días y tan solo ha logrado el tercer puesto con el 23% de los votos. Poco después de conocer los resultados, aseguraba que no se va a rendir y que continuará luchando contra el populismo y la pobreza que sufre el país.

Más de 35 millones de argentinos estaban llamados a las urnas para elegir a su nuevo presidente y vicepresidente. Ahora todas las miradas están puestas en el próximo 19 de noviembre, día en el que se celebra la segunda vuelta de estas elecciones presidenciales.

Unas elecciones presidenciales en Argentina marcadas por la incógnita

Los resultados en las elecciones argentinas nada tuvieron que ver con lo que pronosticaron las encuestas. Sergio Massa consiguió una victoria que, a día de hoy, es difícil de entender. Las consecuencias de una máquina tan potente como la peronista ha hecho posible este resultado. Te recuerdo que han ganado 10 de las últimas 13 presidenciales. La pregunta ahora es saber quién se impondrá en la segunda vuelta. La cuestión está en descubrir si ambos candidatos han llegado a su techo electoral o podrán seguir aumentando sus apoyos.

Cecilia Rodríguez, investigadora del Instituto de Iberoamérica de la Universidad de Salamanca, explica en La Linterna cómo es posible que el actual ministro de Economía pueda ganar las elecciones tal y como está la economía en Argentina: “Es difícil de explicar. Estamos todos sorprendidos. Cuando le explicas a los alumnos, acudes a la teoría del voto económico donde se supone que los votantes, en función de la situación económica, valoran a los candidatos”. Claramente, esto en Argentina no se cumple porque la pobreza está cerca del 40%. “Los números no pueden ser peores y el actual ministro de Economía sale el primero”.

La investigadora apunta a un detalle que ha podido influir en la victoria de Massa: “El pasado domingo se hicieron elecciones para presidente y, el mismo día, se elegía al gobernador de la provincia de Buenos Aires”. En este distrito electoral vive el 40% del país y es un distrito peronista: “El candidato de esta provincia es muy fuerte y generó un efecto arrastre en el voto. Esto ayudó mucho”.

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¿Qué sucederá en la segunda vuelta?

Aunque Javier Milei partía como favorito, finalmente no ha ganado. Cecilia señala que, como “se creía que a segunda vuelta podría llegar Patyricia Bullrich, benefició a Massa y Milei puede que se vea ayudado por la caída de Bullrich”, aunque sostiene que nadie sabe quién puede acabar siendo presidente.

Ahora entramos en un momento de negociación para intentar conseguir los votos del resto de partidos políticos. Gran parte de la oposición está dejando la libre elección para la segunda vuelta. Mientras, el lado más radical, está proponiendo no votar a Milei.

“Dentro del bloque de 'Juntos por el Cambio' hay un sector que va a juntarse con Milei porque es más próximo, pero hay otro sector más moderado que probablemente vaya para Massa. No van a votar en bloque, va a estar dividido”. Cecilia Rodríguez vaticina que “cualquiera de los dos va a llegar en un escenario muy ajustado, van a estar parejos. Hay que ver qué triunfa ahora, si el rechazo al kirchnerismo o el miedo a Milei”.