Alberto no se lo pensó dos veces cuando dieron la alerta roja por las lluvias torrenciales el pasado jueves en Dolores, en la Comunidad Valenciana. Ante el micrófono de ‘La Linterna’ de COPE, con Ángel Expósito, que se ha desplazado sobre el terreno para contar de primera mano la situación en la que se encuentra la zona, explica que se dirigió al ayuntamiento a ofrecerse para ver dónde podían ayudar. 

Usaron tres kayaks grandes de su gimnasio para ayudar a evacuar a personas que habían quedado atrapadas en sus casas. Los llevaban a un lugar seguro y la policía se encargaba de realojarlos.

Estuvieron sin parar desde el viernes hasta el martes, colaborando en las labores de rescate. “Dormíamos una o dos horas y volvíamos a la carga”, explica Alberto. “Hubo situaciones en las que el agua corría con fuerza”. Y agrega que el barro no les daba problemas pero sí las corrientes de agua.

Usando kayaks, contribuyeron a evacuar a más de cien personas en la Vega Baja. Eran ciudadanos que, debido a las inundaciones, habían quedado incomunicados, sin comida y sin agua.

El gimnasio de Alberto también sufrió la feroz fuerza del agua. Se convirtió en un lodazal y este jueves, una semana después, todavía tenían trabajo limpiando el barro que lo había invadido todo. Pero la solidaridad también apareció en este caso. Y es que le están ayudando incluso los de la competencia.

La gota fría azotó el sureste peninsular con lluvias de más de 300 litros por metro cuadrado. El temporal dejó siete muertos en la zona, el desbordamiento de un río, cortes en carreteras y cientos de miles de alumnos sin clase.