Ya ha pasado un año desde que estallara la pandemia en Occidente. La curva diaria de casos, de hospitalizaciones y de muertes en el mundo parece que empieza a bajar y lo hace rápidamente. El porcentaje de población vacunada es todavía demasiado bajo como para provocar esa disminución. Puede simplemente que ahora sí se hayan interiorizado las conductas que reducen los contagios. Demasiado pronto para sacar conclusiones.

En España nos encontramos con el riesgo de repetir los errores de una descalada demasiado rápida. Esta tarde vamos a ver confirmado cómo nos alejamos de los 250 casos por 100.000 habitantes que marcan el riesgo extremo. Estamos lejos de los 50 casos por 100.000 habitantes, que marca el final del riesgo. Mientras llega la inmunización de grupo quedan bastantes meses de distancia social y mascarilla. La economía va a seguir sufriendo. Por eso es tan importante que se utilicen bien los fondos europeos.

A finales del mes de enero se convalidó el decreto ley con el que se regula cómo se van a repartir los fondos europeos. España es una excepción, en otros países se han creado comisiones independientes para adjudicar esos fondos, aquí todo depende del Gobierno. En el debate en el Congreso que se convalidó el decreto, gracias a la abstención de Vox, el PP y Ciudadanos acusaron a Sánchez de haber ocultado un informe del Consejo de Estado sobre la regulación de fodos.

El Consejo de Estado es un organismo independiente, presidido en este momento por Maria Teresa Fernández de la Vega, que fue vicepresdenta con Zapatero. Hay una discusión jurídica sobre si es obligatorio ese informe en este caso. Te la ahorro, el caso es que el Consejo de Estado hizo su informe y por más que la oposición lo pedía el informe no aparecía. Los socios parlamentarios del Gobierno impidieron que la mesa del Congreso solicitara el informe. El Gobierno seguía negando que lo ocultara.

Y mira por donde, ahora ha aparecido el informe y hemos comprendido porque el Gobierno lo escondía. El informe es demoledor, dice que se han eliminado los mecanismos de control en cuanto de la contratación administrativa, los convenios o las subvenciones. El Consejo de Estado pedía que hubiera un riguroso control que no hay con la actual regulación. España tiene mal historial en la gestión de otros fondos europeos.

Si a eso sumamos ahora una gestión a dedo nos encontraremos que las ayudas para una de las economías más dañadas de la UE por el Covid, la nuestra, puede caer en saco roto.