¿Has adaptado tu casa a los avances tecnológicos? ¿Y las tareas domésticas? O eres de los que coge la escoba y el recogedor y metes en la faena de la limpieza. Pero seguro que alguno de los que no está escuchando ahora tiene por su casa dando vueltas un robot de limpieza.

Pues tienes que saber que estos robots ya son algo más que un instrumento para limpiar tu casa llegando a todos los rincones. El desarrollo de estos aparatos los han convertido en instrumentos capaces de vigilar la casa y ser un elemento más de la domótica de una vivienda.

Ya sabes que la domótica es el sistema donde están conectados los distintos aparatos de la vivienda como la calefacción, ventanas, etcétera, y que los programa para que funcionen. Lo que cada vez se conoce más como el internet de las cosas, simplificando.

Los robots de limpieza ya recogen imágenes, reconocen la voz e incluso pueden llegar a reconocer muebles. ¿Y qué pasa si reconocen un mueble determinado? Pues uno de los ejemplos que ha puesto la OFICINA DE SEGURIDAD DEL INTERNAUTA (OSI), que ha publicado una serie de recomendaciones a la hora de utilizar estos aparatos, es que si el robot de limpieza reconoce por ejemplo una cuna, puedes empezar de repente anuncios para bebés.

Pero antes de alertarte, qué cosas tienes que tener en cuenta antes de utilizar estos aparatos.

Ángela García, experta de la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI), una oficina que depende al Instituto Nacional de Ciberseguridad, ha explicado en La Tarde que estos dispositivos están "conectados a internet compartiendo información" y "si no están correctamente configurados las medidas de seguridad se pueden ver alteradas", lo que puede conllevar una pérdida de privacidad. 

Eso abre la posibilidad de que puedan ser hackeados, por lo que la información que recogen estos robots puede ser utilizada "con malas intenciones". Entre esa información, el robot, para sus labores de limpieza, puede recoger el plano de la casa, por ejemplo, e ir archivando imágenes, por lo que si son hackeados se puede averiguar dónde están las cosas de la casa. 

La OSI ha publicado una serie de consejos para antes de utilizar estos robots: 

• Servidor: Es muy importante que comprobemos con el fabricante si, efectivamente, se nos está dando un servicio a través de la nube o a través de un servidor particular al que se envían todos los datos recopilados por el dispositivo.
• Uso de los datos: Otro aspecto fundamental es informarnos sobre qué datos son los que se van a compartir con el servidor, además del uso que se les dará.
• Tipo de servicio: También conviene que preguntemos qué servicios, de los que ofrece el dispositivo, necesitan conexión con el exterior.
• Seguridad: Otro punto a tener en cuenta, es que la conexión desde la nube puede ser un punto de entrada a nuestro hogar y por lo tanto un riesgo. Así, es interesante preguntar si los datos que van a compartirse estarán cifrados e informarnos sobre las medidas empleadas para garantizar su protección.

Además, Ángela García ha aconsejado en La Tarde que se utilicen contraseñas "robustas", además de que se cambien periódicamente así como no conectar todos los dispositivos a la misma red.