¿Viajar con o sin seguro? Una decisión que se suele tomar en función del destino que queramos visitar y que para el 44% de los españoles no tiene especial importancia, ya que acaban optando por hacer turismo sin este tipo de cobertura. Una decisión, sin embargo, que puede salir muy cara.

Esta última semana hemos conocido el caso de Álex García, el joven vizcaíno que ha pasado dos meses ingresado en un hospital en Tailandia. Tras acudir a urgencias con fuertes dolores a los cinco días de comenzar las vacaciones junto a su mujer, le diagnosticaron pacreatitis necrotizante, una complicación en el páncreas que puede resultar mortal. La pareja había contratado un seguro médico que cubría hasta 100.000 euros de gastos, pero esta suma ni siquiera fue suficiente para pagar la hospitalización, sin contar las intervenciones. Cada noche que Álex pasó en la UCI costaba 2.500 euros.

A esto hay que sumarle el coste de dos intentos de repatriación con aviones medicalizados que corrieron a cuenta de la familia y que ni siquiera pudieron efectuar el traslado por la gravedad del paciente. Este fin de semana un avión medicalizado del Ejército Español ha conseguido traerle a España y ahora permanece hospitalizado en Barakaldo, pero, en cuanto a lo económico, han quedado completamente arruinados.

Lo que hay que tener en cuenta para contratar el más adecuado

Casos como este ponen en evidencia el riesgo de viajar sin seguro médico, pero ¿qué debemos tener en cuenta a la hora de elegir el más adecuado? José Carlos Cutiño es el portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en Andalucía, y asegura que contratar o no un seguro de viaje no debería ser algo opcional: "Es algo fundamental. Los gastos de asistencia sanitaria en según qué países se pueden disparar".

Si bien, como miembros de la Unión Europea, podemos hacer uso de la Tarjeta Sanitaria Europea en prácticamente la totalidad del continente, cuando salimos fuera podemos arriesgarnos a que un percance menor se convierta en una deuda inasumible, y más aún si hablamos de un problema de salud grave. Como explica José Carlos Coutiño, los costes por recibir tratamiento en otro país pueden alcanzar cifras inimaginables: "Cien mil euros se quedan prácticamente en nada".

Entonces, ¿qué cobertura económica debemos asegurar para poder viajar con tranquilidad? Desde la OCU advierten de que es mejor no quedarse corto: "Nostros recomendamos como mínimo seguros de entre 300.000 y medio millón de euros". Aunque los números pueden parecer alarmantes, la diferencia en el precio del seguro no es en absoluto abismal: "El incremento que puede suponer el tener una cobertura que sea realmente eficaz sobre el importe total del viaje puede ser relativamente residual".

El portavoz de la OCU también recomienda incluir en nuestro seguro otros servicios como la repatriación o la pérdida del equipaje.