Un grupo de investigadores estadounidenses han desarrollado una vacuna de ARN mensajero que ha conseguido retrasar la recaída de cáncer de páncreas. Esto ha sido posible al combinarse con quimioterapia e inmunoterapia. Los datos son dantescos: El cáncer de páncreas ha sido el artífice de 7.427 muertes en 2022 en España. Esta vacuna ha sido un rayo de esperanza para los años venideros. El ensayo clínico aún está en fase 1, pero ha logrado activar la inmunidad en 8 de los 16 pacientes, y en uno de estos casos ha desarrollado una metástasis en el hígado. Según el sector científico, es uno de los avances más importantes para la medicina actual.

Jorge Alcalde, divulgador científico de 'La Tarde', ha asegurado que es "una gran noticia", pero aclara que "hay que tener precaución, estamos lejos aún", aun así la esperanza en el sector científico es enorme. Ha comentado una estadística negativamente abrumadora: "Solo un 12 por ciento de los que lo padece sobrevive, la inmunoterapia se le resistía a este tipo de tumores". Para nuestra sociedad es fundamental que este tratamiento se siga desarrollando.

Llama la atención que en el último año se usa la palabra vacuna contra el tumor maligno en varias investigaciones y esto no es realmente así, es un tipo de ayuda previa a la quimioterapia. Alcalde lo aclara: "La inmunoterapia es una forma de atacarlo".

El doctor Ignacio Melero, codirector de Inmunología e Inmunoterapia de la Clínica Universidad de Navarra, ha comentado que "en inmunoterapia dirigimos mecanismos de defensas frente al tumor". Ha discrepado con el análisis previo y ha confirmado que "esta vacuna sale de Maguncia, no de Estados Unidos" y añade que "son los que desarrollaron la vacuna frente al covid".

¿En qué consiste esta vacuna exactamente?

Este es un virtuosismo tecnológico nunca antes visto. El especialista asombrado ha explicado el funcionamiento de este tipo de tratamientos: "Lo que hacen es tomar una muestra del tumor, secuenciar todo el genoma que se expresa en forma de proteína, averiguar en qué punto es distinto del DNA de las células normales del paciente y luego ver cuáles de estas mutaciones tiene una mayor probabilidad de ser presentadas como antígenos del sistema inmunitario." Aunque impresionado por este hallazgo asegura que "a día de hoy fallan mucho". Estas vacunas son personalizadas, son distintos tratamientos para cada paciente, ya que "depende del organismo".

Sin embargo, este es un prodigio no sostenible. Melero afirma que si destinamos grandes cantidades de dinero, podremos hacerlas iguales para todos. Este tipo de tratamientos se viene usando en melanomas, donde "el cirujano elimina todo el tumor visible" pero advierte: "La mitad de estos pacientes tienen nidos de células tumorales metastásicas en otras partes del organismo".

Esta vacuna es una especie de ayuda previa a la quimioterapia, Melero sostiene: "A los que inmuniza, inmunizan muy bien y es específico para el tumor, no hay efectos adversos". El doctor está muy feliz, ya que la tecnología no había permitido la personalización de estas vacunas y hemos encontrado vías para educar a nuestro organismo.