La famosa ciudad de Venecia se encuentra en un punto de no retorno. Siendo una de las ciudades más visitadas del mundo y patrimonio de la humanidad y sus míticos canales son un reclamo para sus turistas. Cerca de 20 millones de visitantes al año hacen que en un día esta ciudad pueda ver multiplicada por dos su población de 50.000 personas.

Esta ciudad no tiene que lidiar solo con esta masificación, sino también con las consecuencias del cambio climático, por eso, a lo largo de los últimos años se han ido estableciendo algunas medidas como unos diques que se activan con la subida de la marea o la prohibición de los cruceros en el centro histórico para proteger el patrimonio y evitar accidentes como el que ocurrió en 2019 cuando uno de estos buques chocó contra un barco turístico en su entrada a puerto.

Todas estas circunstancias han provocado que la UNESCO ponga a Venecia en su lista de patrimonio en peligro a partir de septiembre. Cristina Memo, guía turística nacida en Venecia, ha hablado en 'La Tarde' acerca del deterioro de la ciudad que, según ella, “viene viéndose desde los 80”. Cristina cuenta que “las decisiones que se han tomado son un poco equivocadas.

Una ciudad dentro de un lago

La construcción del dique ha convertido las salidas de agua desde la laguna en salida y entrada de un trozo de mar, por lo que dentro de poco Venecia se va a convertir en una ciudad dentro de un lago. "Tenemos que hacernos a la idea de que el paisaje va a cambiar y se van a tener que tomar decisiones en cuanto al turismo”, explicaba Cristina.

Con estas previsiones tan negativas, Cristina opina que Venecia va a acabar convirtiéndose en una especie de parque temático al aire libre en el que las personas no puedan vivir, “habrá servicios para los turistas y ya está, pero es que prácticamente estamos ya en esa circunstancia”. La guía también cuenta que han tenido la sensación en la ciudad de que este informe de la UNESCO no está enfocándose en los problemas reales que tiene la ciudad porque, según dice, “Las medidas que van a tomar son relativas a la parte continental, es decir, la parte de la ciudad que está en tierra firme”.

La guía explica que ya no tienen ninguna esperanza de que la situación mejore: “Llevamos bastante tiempo desengañados porque Venecia se construyó en un momento histórico en el que, a causa de las guerras contra Constantinopla, había muchísimo dinero, y Venecia es una ciudad que requiere mucho dinero y delicadeza para su cuidado y mantenimiento”. Cristina ha contado, con un claro tono de tristeza, que las últimas administraciones no le han dado a la ciudad este cuidado que requiere, y que han perdido ya la esperanza de que la situación se revierta: “Lo tomamos como algo que sabemos que va a ocurrir. Estamos resignados”.