Continúa la búsqueda de la joven Marta Calvo, desaparecida desde el pasado 7 de noviembre en Valencia. Los investigadores se centran en dos localidades: Manuel y L'Olleria.

Sobre el sospechoso, colombiano y de 35 años de edad, acabamos de conocer que fue condenado por narcotráfico en Italia por llevar 9 kilos de cocaína.

Le detuvieron en 2008 por transportar droga oculta en un coche de alta gama con matrícula española y cumplió su condena en una cárcel italiana. Cuando salió, vino a España. Aquí sus antecedentes se limitan a multas y resistencia a la autoridad.

La Guardia Civil no descarta que el sospechoso haya salido de España con ayuda de personas relacionadas con el crimen organizado. Pero también barajan la posibilidad de que pueda estar en nuestro país y sea localizado pronto.

Por eso se intensifica la investigación en los dos pueblos valencianos donde se puede encontrar alguna pista.

En Manuel, los vecinos están a la espera de conocer algún resultado sobre el paradero de Marta Calvo. En Mediodía COPE hemos podido hablar con uno de ellos. Así nos contaba Francisco que el pueblo se espera el peor desenlace.

En Manuel se sigue cada detalle de este caso. “Como es un pueblo pequeño, está todo el pueblo detrás de los periodistas para ver lo qué pasa”, comenta Francisco.

De Jorge, el sospechoso, que llevaba solo tres meses viviendo de alquiler en Manuel, poco se conoce: “Llevaba muy poco tiempo en el pueblo y no lo conocía nadie. Y encima vivía en una parte a las afueras, no en el centro del pueblo, así que tampoco bajaba a la plaza”.

El presidente de la asociación SOS Desaparecidos, Joaquín Amills ha avanzado en Mediodía COPE que llama la atención que el sospechoso tuviera dos pisos alquilados. “Da la impresión de que tiene una casa donde todo el mundo lo conoce, dónde es una buena persona, tiene una imagen pública y luego tiene otro sitio, que es Manuel, que allí nadie lo conoce, que está apartado...y que parece que es un lugar para otra actividad”, ha argumentado.

Joaquín Amills ha explicado que en este caso se podría haber trabajado de una forma más rápida en la alerta pública de la desaparición: “Marta desaparece el día 7 jueves, la denuncia la pone la madre el día 9, sábado. Las denuncias puestas el sábado ya te complican. Además la pone en Valencia en la Policía Nacional, cuando el lugar de la desaparición corresponde a la Guardia Civil, lo cual complica todavía más. Pero a nosotros no nos llega el comunicado por parte del Centro Nacional hasta el día 23, cuando han pasado 16 días de la desaparición”.