El género negro está de moda. Lleva ya años afianzándose entre los lectores a nivel mundial. No es de extrañar, porque cada vez son más los autores que nos enganchan a través de sus historias y nos apartan de nuestra rutina. Y es que no puede haber nada más apetecible que eso. Olvidarse de todo y dejarse llevar por otras vidas interesantes, líneas argumentales en las que aparecen muchos personajes y en las que hay sucesos que resolver.

Esta noche, en Poniendo las Calles, Carlos Moreno "El Pulpo" ha charlado con Marina Minguela. Ella es malagueña y ha llegado para quedarse en este ámbito de la novela negra, y no de cualquier forma. Ha hecho una trilogía de trilogías.

El contexto es clave para el interés del lector

Cuando empezamos a leer un libro, siempre estamos pendientes de donde se desarrollan los hechos. El autor suele poner como escenario principal un lugar que conoce, simplemente por comodidad. Así, a la hora de describir espacios, es más fácil aportar detalles que ninguna otra persona podría si no viviera ahí.

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La verdad es que la novela de Marina, denominada "Pater", genera bastante empatía y, por supuesto, influye el hecho de que el escenario sea Málaga, una ciudad nuestra, con protagonistas que podríamos ser cualquiera de nosotros. Es un ambiente como "muy de estar por casa": "Los personajes de esta novela son personas normales y corrientes. Podrían ser tus vecinos, personas que trabajas, que bromean. Y es que está claro que empatizas con una persona que podrías ser tú".

Malole, el personaje principal

El policía es el inspector que está a cargo del caso. Uno de los protagonistas de este thriller ambientado enMálaga. Pero, además, hay otra clara protagonista: Malole, una mujer de unos cincuenta años. Es un personaje con una gran personalidad, y es verdad que se mete en todos los saraos, hasta el punto de que ayuda a resolver el caso no tiene desperdicio.

Así lo describía Marina en Poniendo las Calles: "Ella es psicológa, tiene unos cuantos másters en este ámbito, y además es madre de familia. Y es que, como suele suceder en la sociedad en un matrimonio, siempre, cuando vienen los hijos, se decide que uno deje de trabajar, y en este caso fue ella. Ella es una persona muy inquieta, y cuando sus hijos salen de casa ella quiere volver a trabajar y se encunetra con un caso en el que un adolescente desaparece, y es el hijo de sus vecinos".

¿Cómo se escribe una trilogía de trilogías?

Es raro escuchar este concepto. Lo normal es escribir un libro y parar ahí. Ponerle un punto y final. Como mucho, ponerle un punto y aparte y continuarla con una secuela. Pero Marina ha ido más allá. No se ha conformado con poco. Ha apostado fuerte por su creación, por su obra, y ha decidido hacer una trilogía de trilogías. Y no descarta continuarla.

Ella misma nos lo ha explicado esta noche en Poniendo las Calles: "Es una serie de nueve novelas, en principio, distribuidas en tres trilogías. En la primera se cuenta un poco la vida de los personajes, los conocemos más a fondo y da a conocer el hilo conductor de toda la serie. Hay un primer caso que queda resuelto en el tercer libro de la primera trilogía, y será un poco el que guíe la trama en las siguientes".