En esta segunda edición de la tercera temporada una de las protagonistas ha sido una monja contemplativa, Míriam. Su vocación proviene después de la muerte de su hermano como consecuencia de un tumor cerebral en 2012, aunque ella ha estudiado Educación Primaria. Una de sus iniciativas ha sido poner en marcha: www.hermanaspobres.com y www.escuestiondemirada,com, esta última con la venta de productos (mascarillas, cuadros decorativos, etc.) con los que tratan de lograr su manutención.

"Me cambió la vida para bien. Lo veía con tanta paz y serenidad de llevar la enfermedad que me cambió la vida de cómo afrontar mi vida. La enfermedad la hemos vivido muy bien porque con la fe se puede llevar mucho mejor", ha explicado en el programa, en referencia a la enfermedad a su hermano, que ha sido uno de los motivos por los que ella decide entrar a formar parte de esta congregación.

Cuando muere su hermano en 2015 este convento le invita y, según explica, "es ahí cuando se me quedó gravadísimo que Dios quería mi felicidad". Sin embargo, ha explicado, que ella ha tardado "dos años en entrar definitivamente", ya que al principio solo "venía de vez en cuando al principio".