La muerte de Karl Lagerfeld, el kaiser de la moda, deja un gran vacío en el mundo de la moda y entre sus seres más queridos. Su famosísima gata Choupette, que tanto le ha acompañado, ha perdido a su protector.

El kaiser de la moda tenía a su gata con los mejores cuidados y no escatimaba en ello. Choupette contaba con dos cuidadoras.

La simbiosis de ambos era tal, que Lagerfeld creó un personaje a Choupette convirtiéndola en la gata más famosa del mundo, con permiso de tantos gatos como Garfield, Doreamon o Hello Kitty. Choupette cuenta con un blog, y con sus redes propias de internet y en ella el director creativo de Chanel y de su firma Karl Lagerfeld, vio una estrella capaz de facturar tres millones de euros anuales. Periodista de Karl Daily, modelo que incluso compartió portada para Vogue con Gisele Bündchen, contaba con una colección de accesorios en las que compartía escena con el excéntrico diseñador de pelo blanco con coleta, amplias gafas de sol, guantes y traje en black and white como santo y seña.

Choupette es una de las mascotas más famosos a nivel mundial. Hace unas horas Choupette ha querido rendirle un sentido homenaje con un emotiva carta a su daddy Karl Lagerfeld:

"A los fanáticos, seguidores y la moda de papá,

Con gran tristeza confirmo que mi papá Karl Lagerfeld falleció el 19 de febrero de 2019. Fue un verdadero icono que tocó las vidas de todos. Él siempre vivirá en mí, ahora mi corazón está roto y como están los corazones de todos sus seguidores por todo el mundo. 

Estoy eternamente agradecido por la vida y el amor. Nunca olvidaré los momentos que compartimos viajando, explorando y creando.

Que la memoria de papito Karl Lagerfeld, vive para siempre a través de su trabajo y que no se olvide su genio creativo que ahora se sienta en el cielo junto a Mommy Coco Chanel.

Con amor

El fanático más grande de papá Karl, Choupette".

Conociendo a Lagerfeld seguro que habrá dejado a buen recaudo a su querida Choupette y quién deberá gestionar sus cuentas y su carrera profesional que hoy celebrará tristemente el día del gato.