Un tipo al que no le asusta la cocina y que con la edad ha ido variando sus gustos como nos comenta en esta grata charla. Seguramente su nombre artístico ya no le acompaña, porque su vida en los últimos años ha cambiado mucho y en esto tiene que ver que se ha convertido en abuelo.

Enrique Villarreal El Drogas, el músico de las palabras brujas, publica un quíntuple disco bajo el título “Solo quiero brujas en esta noche sin compañía”, donde el rock viste cinco "timbres" distintos cada uno con una ambientación musical, temática, arte o coproducción diferente; más una voz, la suya, que muda de piel como las serpientes.

El Drogas propone un viaje por 42 historias cortas ecléctricamente instrumentadas por sus habituales compañeros de banda más interesantes colaboraciones como Natxo Zabala, Carolina De Juan de Morgan o Jimmy Barnatán. 

Versos que arañan, salpican lágrimas, literatura, actualidad, amor, compromiso social, lenguaje tabernario, poético y hasta un circo imaginario demasiado real. Cada uno de los discos del proyecto están bautizados con un “timbre” y una palabra que ilustra el contenido: “Timbre Acústico”, “Europa (Timbre Oxidado)”, “Timbre Canalla y de Bullanga”, “Timbre Fundido” y “Timbre Equivocado”.

“Solo quiero brujas en esta noche sin compañía” es un proyecto artístico completo que continúa resonando en la cabeza al salir la luz. Los detalles melódicos e instrumentales dragan sueños, nos llevan a mirar a los ojos de unos personajes que al final resultan ser las tormentas de nuestro propio naufragio. Sus piezas podrían volar de manera independiente. Sin embargo, juntas, perdurarán.