El presidente de la CEE viaja a Roma para la cumbre de protección de menores

Mons. Ricardo Blázquez viaja desde Barcelona a Roma para unirse al Papa y los presidentes de otras conferencias para tratar el drama de los abusos

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El presidente de la Conferencia Episcopal Española, Ricardo Blázquez, viaja hoy a El Vaticano para la cumbre sobre protección de menores en la Iglesia. Allí, se va a unir al Papa Francisco y a sus homólogos del resto del mundo para un encuentro que va a comenzar mañana jueves 21 de enero. El cónclave se va a prolongar hasta el próximo domingo 24 de febrero. 

Mons. Blázquez viaja desde Barcelona a Roma. El trayecto coincide con su estancia previa en la diócesis de Sant Feliu de Llobregat. El arzobispo de Valladolid ha participado allí en una jornada con pastores diocesanos. Blázquez también ha celebrado la Eucaristía junto con la comunidad del convento e impartido una conferencia sobre la "sinodalidad y comunión en el ministerio presbítero diocesano".

Protocolos canónico y civil para combatir los abusos en España 

El presidente de la CEE va a participar de la cumbre de protección de menores en la Iglesia. El purpurado español va a poder aportar la visión del tratamiento de esta temática en nuestro país. La Conferencia Episcopal Española dispone de dos protocolos para trabajar contra los abusos. Se trata de dos procedimientos para afrontar el problema desde las perspectivas canónica y civil

Estos manuales llevan vigentes desde el año 2010. Junto a ellos, figuran los trabajos de una Comisión Episcopal creada con varios fines. El primero, ayudar a preparar los materiales que Mons. Blázquez va a presentar en Roma. Además, tiene la misión de actualizar estos protocolos y llegar a una nueva normativa de la CEE en sintonía con la Santa Sede. Estos objetivos se trabajan a la espera de los resultados de la cumbre, que podrían influir en su desarrollo. 

Este organismo se constituyó en septiembre de 2018, el mismo mes en el que Francisco convocó a todos los presidentes de las conferencias episcopales a este encuentro. Comenzó sus labores un mes después bajo la presidencia de Mons. Juan Antonio Menéndez Fernández, Obispo de Astorga.    

Los ejes de la cumbre: responsabilidad, rendición de cuentas y transparencia

El Santo Padre y los episcopados van a trabajar sobre el drama de los abusos con tres ejes principales. Estos puntos de referencia son la responsabilidad, la rendición de cuentas y la transparencia dentro de la Iglesia. Cada uno de estos temas va a ocupar un día de la cumbre en la que las víctimas van a estar muy presentes.

El Papa pidió a los presidentes de las conferencias episcopales que se encontraran cara a cara con víctimas para preparar esta cumbre. El resultado de varias de estas experiencias se van a proyectar en la inauguración. Hasta los miembros del comité organizador han sido partícipes de este deseo del Sumo Pontífice. 

La dinámica del encuentro va a pasar por grupos de trabajo. Van a ser 11 en total, con alrededor de 17 integrantes cada uno. Se han dividido de esta manera por un criterio lingüístico. En estos grupos, los prelados de todo el mundo van a poder debatir, intercambiar impresiones y experiencias en torno al tratamiento de los abusos en el seno de la Iglesia. 

Este nuevo paso de la Iglesia contra los abusos y por la protección de los menores y adultos vulnerables incluye trabajo, pero también oración. El encuentro va a incluir momentos de culto y una misa penitencial que va a presidir el Papa Francisco en la noche del sábado. La clausura también estará marcada por la celebración eucarística del domingo con una homilía del pontífice en la Plaza de San Pedro

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