ÁNGELUS 11 AGOSTO

Francisco anima a poner los ojos en el Cielo y recuerda los 70 años de los Convenios de Ginebra

El Santo Padre reflexionó sobre el momento en el que Jesús llama a sus discípulos a la continua vigilancia.

Redacción Religión

Tiempo de lectura: 2’

Francisco exhortó a prepararnos para el encuentro final y definitivo con el Señor, recordando que la vida es un camino hacia la eternidad, por ello "hay que vivir y actuar en esta tierra teniendo en el corazón la nostalgia del cielo". El 11 de agosto, XIX domingo del tiempo ordinario y memoria litúrgica de Santa Clara de Asís, virgen y fundadora de las Clarisas; el Papa Francisco rezó la oración mariana del Ángelus acompañado de miles de fieles y peregrinos reunidos en la plaza de San Pedro bajo el caluroso sol del verano romano. 

Lee aquí las palabras del Papa

Con estas palabras- aseveró el Papa- el Maestro nos recuerda que la vida es un camino hacia la eternidad; por lo tanto, estamos llamados a hacer fructificar todos nuestros talentos, "sin olvidar jamás que no tenemos aquí la ciudad estable, sino que vamos en busca de la ciudad futura" (Heb 13,14). En esta perspectiva, cada instante se vuelve precioso, por lo que es necesario vivir y actuar en esta tierra teniendo en el corazón la nostalgia del cielo.

"Si habremos vivido en sintonía con el Evangelio y los mandamientos de Dios, Él nos hará partícipes de su felicidad eterna en la patria celestia", indicó Francisco, asegurando que el pensamiento del encuentro final con el Padre, "rico en misericordia", nos llena de esperanza y nos estimula a comprometernos constantemente en nuestra santificación y en la construcción de un mundo más justo y fraterno: "Que la Virgen María, con su intercesión maternal, sostenga este compromiso nuestro", concluyó.

Tras rezar a la Madre de Dios, el Santo Padre saludó a los miles de fieles y peregrinos congregados en la plaza de San Pedro y recordó que el 12 de agosto se celebra el 70º aniversario de los Convenios de Ginebra, "importantes instrumentos jurídicos internacionales que imponen límites al uso de la fuerza y que tienen por objeto proteger a los civiles y a los prisioneros en tiempos de guerra".

Religión