"Ojalá sea un curso lleno de oportunidades de hacer cosas diferentes de buscar nuevos caminos"

La Responsable Gabinete de Presidencia de Cáritas Española, Marisa Salazar, ha deseado a todos un buen inicio de curso pese a llevar a veces "una mochila a veces demasiado cargada"

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Digamos de vez en cuando gracias por todo eso que esperamos y que nos vendrá y vivamos lo que no esperamos y nos hará sufrir con esperanza renovada de que, aunque parezca mentira, no estamos solos en el camino, hay muchos que nunca cierran ni por vacaciones, ni por nada….

Espero, después de un tiempo de silencio, que se encuentren muy bien,que muchos de los que nos leen hayan podido disfrutar de un descanso merecido para la mente y el cuerpo. En un inicio de curso escolar, después de este casi año y medio diferente, hay muchas enseñanzas, muchos sentimientos, muchas frustraciones, pero también muchas preciosas oportunidades….

Me gustaría recordar a todas aquellas personas que nunca, nunca cierran por vacaciones. Seguro que todos han visto alguna.

A mí me encanta pasearme por algunas de esas iglesias silenciosas de Madrid, muchas de ellas abiertas, en el mes de agosto. En una de ellas, de las que soy asidua y que mantiene unas religiosas de clausura estupendas, a eso de las 15. 30h y a casi cualquier hora siempre está expuesto el Santísimo y, acompañándole, casi siempre, hay una religiosa pequeña con su espalda encorvada por muchas batallas. El otro día me miró cuando entré, me sonrió. Le pregunté : "¿hermana, está bien?" Me contestó "sí hija, estoy muy bien, en la mejor compañía".

Rezo cada día para que aprendamos de este tiempo, para que salgamos renovados, para que el mundo cambie a mejor, para que no nos acostumbremos a las muertes, a la indiferencia, a no sentir cerca a los que sufren en muchas partes del mundo por muy lejos físicamente que estén y los sintamos con nosotros, recemos por su sufrimiento, luchemos por su vida, cada uno a su manera y desde donde pueda, pero juntos.

Estoy en la mejor compañía solo Dios sabe, solo Dios entiende. La semana pasada la cadena Cope nos regaló una preciosa entrevista con el Papa Francisco. Muchas cosas me llamaron la atención de sus respuestas, como siempre, pero sobre todo, una vez más, me cautivó su sencillez. “Si Dios me deja soy un desastre”, ” Solo soy un pecador que quiere hacer el bien “...

Me parece una preciosa reflexión a la que me apunto. Nos creemos capaces de muchas cosas pero los que tenemos la suerte de sentir, cada uno a su manera, que Dios nos acompaña en la vida, ojalá no olvidemos nunca la humildad de saber que somos “alguien”, únicos e imprescindibles en su cariño, solo en eso, nada más y nada menos que en eso. El amor y el cariño nos hacen imprescindibles, seamos humildes. En todo lo demás somos sustituibles, siempre habrá alguien que sepa más, que lo haga mejor, que sea mejor, pero en el cariño de los que nos quieren, en el amor de Dios somos únicos e irrepetibles... ¡qué maravilla!

Por eso es tan especial, tan fundamental cada ser humano, cada persona, su dignidad, el amor y el respeto que debemos sentir hacia él, hacerlo imprescindible en nuestro corazón a través del amor y del cariño que sentimos hacia ellos.

Parece que no se nos presenta a este mundo nuestro, un inicio de curso fácil. Llevamos la mochila a veces demasiado cargada, se nos han ido muchas personas imprescindibles por diferentes motivos, hemos vivido situaciones que nunca pensamos, cansancio, impotencia... Estamos como los peques que inician el curso , un poco peor porque ya no tenemos su inocencia y tenemos más responsabilidad, pero igual de expectantes ante un mundo que no volverá a ser como antes.

Por otro lado ojalá, seguro que sí, que sea un curso lleno de oportunidades de hacer cosas diferentes, de buscar nuevas vías, nuevos caminos... El mundo es diferente y a todos se nos ha dado la oportunidad de adaptarnos, de cambiar, de ser mejores y si lo intentamos, somos capaces.

Les deseo, de todo corazón, lo mejor para este curso, que busque la compañía del mejor compañero como Sor Enriqueta, que sean conscientes de que todos somos imprescindible en recocernos pecadores con el único deseo de hacer cosas buenas. Queramos hasta el máximo y hagámonos imprescindibles en lo único que cambia el mundo ser buena gente y querer y respetar por encima de todo.

Mucho, mucho ánimo, seguro que lo mejor está por llegar. Digamos de vez en cuando gracias por todo eso que esperamos y que nos vendrá y vivamos lo que no esperamos y nos hará sufrir con esperanza renovada de que, aunque parezca mentira, no estamos solos en el camino, hay muchos que nunca cierran ni por vacaciones , ni por nada….

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