EN 'EL ESPEJO'

El sacerdote valenciano recién ordenado que va a trabajar en la diócesis más pobre de Nicaragua

El pasado sábado se ordenaba sacerdote en Nicaragua un diácono valenciano, que va a trabajar en una de las diócesis más pobres del país   

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José Vicente Morade 37 años, ha sido ordenado sacerdote el sábado por el cardenal Leopoldo Brenes en la Catedral de Managua. Es miembro de una comunidad neocatecumenal de la parroquia Sagrada Familia de Torrent, y marchó hace unos años a Nicaragua para formarse como sacerdote en el Seminario Misionero Redemptoris Mater “Nuestra Señora de Guadalupe”, en Managua.

Desde hace un año presta sus servicios en la diócesis de Siuna, donde continuará ahora; en este momento ayuda en la oficina de la curia y en la parroquia Nuestro Señor de Esquipulas, que actualmente funciona como Catedral. Se trata de la diócesis más pobre del país, cuenta con 13 parroquias y 20 sacerdotes y es una región en la que conviven varias etnias, y en la que se habla español, miskito, inglés y mayangna.

Se trata de una zona selvática en la que las parroquias tienen grandes extensiones, con núcleos pequeños de población y alrededor de 50 capillas esparcidas por la montaña o a lo largo de los ríos. A veces sólo se puede acceder a caballo o en bote, de forma que sólo se visitan dos veces al año las más lejanas, y una vez al mes las más cercanas.

José Vicente entiende que su misión consiste en dar una respuesta a los problemas actuales desde la fe… en un país que necesita urgentemente a Dios en su actual circunstancia histórica, marcada por la pobreza, las rupturas familiares y la división que está desencadenando la actual crisis política y social. La gente sufre, tienen una carencia afectiva descomunal, y sólo Dios puede ofrecer una respuesta a la altura de esta necesidad, ha dicho poco antes de su ordenación.

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