¿Cómo se hace la inmersión lingüística en los centros cristianos de Cataluña?: "Depende de la realidad social"

La Fundación Escuela Cristiana de Cataluña, que aglutina a 400 centros, asegura en ECCLESIA que sus alumnos finalizan sus estudios dominando las dos lenguas oficiales

Tiempo de lectura: 2’

Cataluña ha iniciado este lunes, 5 de septiembre, el nuevo curso escolar en Infantil y Primaria, y lo hace con la polémica llamada de la Generalitat de Cataluña a los centros para que no apliquen el 25% de las clases en Castellano.

El anuncio afecta a todos los colegios, incluidos los que ya impartían este porcentaje desde hace años. El Govern se ampara en la nueva legislación aprobada en el Parlament de Cataluña, que establece que no se pueden implantar porcentajes en el uso de lenguas en la escuela, y que el Tribunal Superior de Justicia ve indicios de inconstitucionalidad.

La inmersión lingüística en los centros de la Fundación Escuela Cristiana de Cataluña

La inmersión lingüística continúa siendo motivo de polémica entre los gobernantes estatales y autonómicos. Desde la Fundación Escuela Cristiana de Cataluña su secretario general adjunto, Miguel Mateo, ha asegurado que en los 400 centros que aglutinan esta organización trabajan la inmersión “a través de proyectos educativos con la finalidad última de que los alumnos que terminen la ESO dominen ambas lenguas oficiales, el Castellano y Catalán”, ha expresado en ECCLESIA.

Mateo ha señalado que estos proyectos varían en función del centro, reflejando “la realidad social de cada uno de ellos, porque no es lo mismo un área catalano-parlante sin inmigración que otros lugares con un elevado número de inmigrantes”, sostiene el responsable de la fundación.

En este sentido, ha insistido en que estos proyectos de inmersión lingüística adaptan la realidad social a lo que determina la normativa, “que pretende que los alumnos acaben su escolarización con el conocimiento de ambas lenguas y otras que se oferten”, apunta.

El director general adjunto de la Fundación Escuela Cristiana de Cataluña ha detallado que entre el 50 y el 60% de su alumnado proceden de fuera de la comunidad y de nuestro país, por lo que la intencionalidad de la fundación es “intentar acogerlos y luego con el tema del idioma se va desarrollando durante la escolarización”.

En caso de que haya determinados alumnos que presenten dificultades lingüísticas, explica Miguel Mateo, se oferta desde los centros “una intervención más personalizada, con actividades que eviten cualquier tipo de discriminación que les impida seguir escolarizados”.

Asimismo, el responsable de la fundación ha hecho hincapié en que las familias con hijos en estos 400 centros apenas han mostrado su malestar por su política lingüística: “Si ha habido, han sido muy pocas y sin trascendencia. No existe conflicto”, ha reiterado.

La inflación, presente en el inicio de curso

En otro orden de asuntos, el director general adjunto de la Fundación Escuela Cristiana de Cataluña ha advertido que la inflación se ha dejado ver en este inicio de curso, concretamente en el precio del material escolar: “La pandemia ha puesto muy en evidencia la conjugación de dos crisis, una la demografía y la otra la economía. Se han sumado dos situaciones en las que el descenso del alumnado es evidente en todo el territorio, también en Cataluña y la afectación económica que ha traído la crisis. Ha afectado de manera importante a un estamento social que es la clase media, el segmento más importante que forma parte de las familias que confían en nosotros”.

Por ello, Mateo ha indicado que se “han ampliado las becas, ayudas al comedor o al material”. “Tenemos un nivel de escolarización con necesidades elevadas, pero les garantizamos que con la ayuda necesaria seguirán en nuestros centros”, ha agregado.

Religión