Escuelas Católicas lamenta que ningún ministerio conceda ayudas para evitar el cierre de centros infantiles
Tanto Escuelas Católicas como otras patronales denuncian que la crisis que vive el sector ha supuesto el cierre del 20% de los centros, por lo que piden ayuda del Gobierno
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Escuelas Católicas ha avanzado en Aleluya que las patronales de los Centros de Asistencia y Educación Infantil privados estudian lanzar una campaña para visualizar ante las familias los problemas de supervivencia que están sufriendo muchos de estos espacios. Alrededor del 20% de los centros se han visto obligados a cerrar sus puertas ante la grave crisis que padece el sector, agravadas por la pandemia.
La asesora jurídica de Escuelas Católicas, Carmen Estévez, ha remarcado que antes de finalizar el mes de junio, pretenden emprender esta campaña: “Sería algo similar a los lazos naranjas con motivo de la ‘Ley Celaá’, que permita visualizar lo que está ocurriendo”.
El auge del teletrabajo, el miedo de llevar a los hijos a estos centros por posibles contagios, el creciente descenso de la natalidad, la persistente competencia desleal de establecimientos que se publicitan engañosamente como centros de Educación Infantil sin la oportuna autorización administrativa o la creación de 65.000 plazas públicas y gratuitas de primer ciclo de educación infantil que contempla la nueva ley educativa (LOMLOE), han sumido a estos centros infantiles privados en una enorme crisis, ya que las matriculaciones han sufrido un importante descenso, que van desde el 40% y hasta el 80%.
En cualquier caso, Carmen Estévez ha subrayado que esta crisis se viene dando desde antes de la pandemia: “En junio y octubre de 2020 la Mesa de Infantil y los sindicatos hicimos dos declaraciones conjuntas pidiendo al Gobierno que nos recibiera. La ministra de Educación ni nos ha contestado. También solicitamos encuentros con el Ministerio de Trabajo, de Seguridad Social y de Hacienda para que pudiésemos recibir algún tipo de ayudas, facilidad en el pago de impuestos, exenciones, etc. pero no hemos recibido ninguna contestación”, ha lamentado la asesora jurídica de Escuelas Católicas.
De continuar así la situación, Estévez no se atreve a pronosticar el número de centros infantiles que podrían cerrar en el futuro. Para ello, esperarán a realizar el estudio a que termine el curso escolar: “Hay empresarios que han decidido mantenerse poniendo dinero de su propio patrimonio. Otros no pueden. Ya veremos”.
