El motivo por el que se instalan los toldos con motivo de la procesión del Corpus Christi: no es por calor

Ciudades como Toledo, Sevilla o Granada ya han comenzado a instalar los alargados toldos que cubren la procesión con el Cuerpo del Santísimo, que tendrá lugar el 16 de junio

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Se acerca la celebración del Corpus Christi,que este año será especial después de dos años sin que el Cuerpo del Santísimo no pudiese procesionar por las calles de pueblos y ciudades de nuestro país a consecuencia de la covid-19.

En este 2022, la festividad litúrgica es el domingo 19 de junio, mientras que la procesión se adelanta al jueves 16. Ciudades como Toledo, Granada, Sevilla o Granada viven con gran intensidad esta festividad.

En los días previos a la procesión de la Custodia las calles por donde desfila el Cuerpo de Cristo se engalanan, lucen sus mejores galas dejando una sensación de colorido y un olor característico a tomillo por ejemplo en la ciudad de Toledo, cuyos motivos decorativos son un gran atractivo para vecinos y visitantes.

Desde el pasado 26 de abril, la capital castellano-manchega ha comenzado a instalar los toldos del Corpus, el gran palio que sobrevuela la procesión de la Custodia de Arfe con Cristo Sacramentado en su interior.

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Pese a la creencia popular de que los toldos que ejercen de palio se emplean para evitar el sofocante calor que generalmente azota a buena parte del territorio español en las fechas en las que se celebra la procesión del Corpus, tiene una función simbólica.

El palio es una especie de dosel o techo colocado sobre cuatro o más varas largas, que sirve en las procesiones para que el Santísimo o la imagen que se porta sean protegidos de las inclemencias del tiempo o de otros accidentes.

Estos suelen ser de telas brocadas y bordadas, su forma es por lo general rectangular, cuadrada o tipo sombrilla. Tienen un techo y una especie de cortinas hacia abajo. Tanto el techo como las cortinas suelen llevar alegorías eclesiales. Suele ser una pieza bastante adornada.

Una tradición en Toledo es que los toldos, al comenzar a instalarse con semanas de antelación, en pleno periodo primaveral, se vean afectadas por las lluvias propias de esta época del año, provocando daños y desperfectos. Ya en este 2022 ha ocurrido, por lo que los operarios del Ayuntamiento han tenido que trabajar a destajo para subsanar los destrozos.





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