La vocación de Pablo y Gloria, un futuro matrimonio misionero en Tanzania

A unos meses de su boda, Pablo y Gloria vivirán durante tres años en Tanzania. Quieren ser un matrimonio misionero que lleve el Evangelio donde Dios les llame.

Tiempo de lectura: 2’

España es el país del mundo que más misioneros tiene fuera de sus fronteras, más de 10.800, sobretodo en América. Es un dato que José María Calderón, presidente de las Obras Misionales Pontificias no se cansa de repetir. Misioneros sacerdotes, consagrados y laicos enviados a tos cinco continentes.

Pablo y Gloria están a punto de engrosar esa lista. Se casan en octubre y tienen 26 y 24 años respectivamente. Él es ingfeniero industrial y ella, enfermera. Se irán a Tanzania como matrimonoi misionero. Son de la diócesis de Madrid. ''Dios nos llama al matrimonio y a la vocación misionera'', explica Pablo de Mergelina.

Afirma que Gloria tiene unos tíos que fueron misioneros en Perú y ello sembró ''esa semilla en el corazón''. Hasta que no fue mayor de edad no pudo ir a visitar a sus tíos dos meses. Fue la experiencia que le hizo conocer la vocación: quería esa vida, se enamoró de esa vida. Conoció a Pablo después.

Para Pablo la decisión ha sido fácil porque Gloria lo tenía muy claro

''No tener que pensar en un piso para vivir aquí lo hace todo más fácil'', confirma. Como enviados por la diócesis de Madrid, les recibe la diócesis de Bunda, que les está buscando dónde empezar. ''Hay que dejarse hacer'', confirma. Harán lo que les pidan, ''vivirán donde crean que es mejor''. No hay que pensar mucho, ''todo lo recibimos con el corazón abierto''. Tampoco hay que llevar muchas cosas. Se van tres años, auqnue han pensado en irse toda la vida y fundar una familia en misión, ''pero la diócesis de Madrid, para el discernimiento, lo hace en tramos de tres años''.

Como el noviazgo, ''ha sido un discernimiento'' donde han descubierto que el Señor les llama a dar la vida en la misión. Ha sido un descubrimiento vocacional sencillo, fácil, ''del día a día''. Una vocación también laical, y es que ser laico no es una vocación secundaria, sino que están llamados a protagonizar una misión.

La gran cantidad de misioneros españoles en el mundo demuestra que nuestro país es activo y misionero. Y los misioneros deben ser apoyados para difundir la palabra de Dios a todo el mundo.


Más vídeos

Religión