Omella se suma a la celebración del Día Mundial de la Educación Ambiental: "Dios nos los confió..."

El objetivo de la educación ambiental es generar una conciencia y soluciones pertinentes a los problemas ambientales actuales causados, principalmente, por actividades humanas

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El presidente de la Conferencia Episcopal Española y arzobispo de Barcelona, card. Juan José Omella, se ha querido sumar al Día Mundial de la Educación Ambiental ofreciendo una interesante reflexión en sus redes sociales para este día tan importante.

Los árboles, los animales, las montañas, el mar, las estrellas, el aire, las nubes o los ríos son obra del Creador. Dios nos los confió para que cuidáramos de ellos” ha escrito el card. Omella este miércoles, 26 de enero.



El Día Mundial de la Educación Ambiental

Cada 26 de enero se celebra el Día Mundial de la Educación Ambiental, que tiene su origen en 1975 en Belgrado, en el Seminario Internacional de Educación Ambiental.

Durante el evento se establecieron los principios de la educación ambiental en el marco de los programas de las Naciones Unidas. Asimismo, se publicó la Carta de Belgrado, en la cual se plasman los objetivos fundamentales de la educación ambiental a nivel mundial.

El objetivo de la educación ambiental es generar una conciencia y soluciones pertinentes a los problemas ambientales actuales causados, principalmente, por actividades humanas erróneas. Esta efeméride busca sensibilizar a las personas sobre la delgada línea que existe entre el desarrollo humano y la conservación del planeta.

La educación ambiental busca crear conciencia en todas las personas sobre la importancia de cuidar el medio ambiente, de proteger la flora y la fauna de sus localidades y sumarse a las iniciativas mundiales. Además, gracias a la educación ambiental se busca hacer presión a los gobiernos para que creen políticas que resguarden los entornos naturales y den soluciones a las problemáticas medioambientales de su país.

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La Encíclica Laudato Si'

El Dicasterio Vaticano para el Servicio del Desarrollo Humano Integral subrayó que las enseñanzas de la Encíclica Laudato Si' son particularmente relevantes en el contexto actual de la pandemia de coronavirus, que ha paralizado muchas partes del mundo. La Encíclica ofrece la visión de construir un mundo más justo y sostenible.

Laudato si’ nos recuerda, que “todo está conectado” y trágicamente, esta catástrofe sanitaria tiene mucho en común con la catástrofe ecológica: el Dicasterio Vaticano recuerda que ambas son emergencias mundiales que afectarán a muchas personas, tanto directa como indirectamente, ambas son sufridas más gravemente por los pobres y vulnerables, y ambas dejan al descubierto las profundas injusticias de nuestras sociedades y ambas se resolverán sólo a través de un esfuerzo conjunto que apele a nuestros mejores valores comunitarios.



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