El Vaticano no halla pruebas de abusos del cardenal Gérald Lacroix y no continuará la investigación

En un comunicado, la Santa Sede asegura no hallar "conductas negativas" del arzobispo de Québec, que fue acusado por una mujer anónima de haber abusado de ella entre 1987 y 1988

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La investigación canónica sobre la acusación de abuso sexual presentada en Canadá contra el cardenal Gérald Lacroix no ha hallado pruebas de "conductas negativas" del purpurado, tal y como ha informado este martes la Santa Sede, que ha avanzado que no realizará otras pesquisas sobre el caso.

"A la luz de los hechos examinados por el juez, el informe no permite identificar alguna acción que se configure como una conducta negativa o abuso por parte del cardenal. Por ello, no se prevé un procedimiento canónico más profundo", se puede leer en el comunicado.

El pasado enero, el cardenal y arzobispo de Québec, de 66 años, fue acusado por una mujer, cuya identidad se desconoce, de haber abusado de ella entre 1987 y 1988, cuando tenía 17 años. La causa formaba parte de una demanda colectiva contra quince personas de la diócesis.

Acto seguido, Lacroix negó "categóricamente" las acusaciones: "Nunca, que yo sepa, he realizado acciones inapropiadas hacia nadie, ya sean menores o adultos. Mi alma y mi conciencia están en paz ante estas acusaciones que refuto", manifestó en un mensaje.

El 8 de febrero, el Papa Francisco asignó al antiguo juez de la Corte Superior de Québec, André Denis, una investigación canónica preliminar para aclarar las acusaciones contra la archidiócesis. Las pesquisas de Denis terminaron este 6 de mayo y fueron entregadas al Pontífice argentino en los días posteriores, concluyendo que no se ha probado la acusación contra Lacroix.

De esta manera, el obispo de Roma ha autorizado al magistrado a difundir un comunicado que resuma los elementos de su investigación y a responder a eventuales preguntas sobre el caso: "El Santo Padre dirige un profundo agradecimiento al juez André Danis por haber concluido, en los tiempos previstos, el mandato que le había sido encargado y que ha desempeñado con imparcialidad, en el contexto de la causa colectiva contra la Archidiócesis de Québec", concluye el comunicado de la Santa Sede.

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