El Papa pide huir de los populismos y romper con "la sordera que nos impide escuchar el grito de los débiles"

En la Misa presidida por Francisco en el marco de la VI Jornada Mundial de los Pobres, propone dar testimonio para "encender luces de esperanza en medio de la oscuridad"

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El Papa Franciscoha afirmado que la Jornada Mundial de los Pobres es una llamada a los fieles para que “rompan la sordera interior que nos impide escuchar el grito sofocado del dolor de los más débiles”. En estos términos se ha expresado el Santo Padre durante la celebración de la Santa Misa en el Vaticano que ha presidido junto a 180 pobres.

La crisis climática, la pandemia o un mundo repleto de escenarios bélicos y de injusticias, ha dejado tras de sí un profundos malestares físicos, psicológicos, económicos y sociales , y que como ha recordado el Pontífice provoca que “muchos hermanos y hermanas, probados y desalentados, emigran en busca de esperanza, y muchas personas viven en la precariedad por la falta de empleo a causa de condiciones laborales injustas e indignas”. En este sentido, Francisco ha destacado que son los pobres las víctimas “más penalizadas de cada crisis”.

Una realidad que precisa de que la sociedad despierte, no permanezca “adormecida e insensible” para así “escuchar su débil grito de dolor, llorar con ellos y por ellos, ver cuánta soledad y angustia se esconden también en los rincones más olvidados de nuestras ciudades”, ha reclamado en la homilía.

El Papa alerta sobre el populismo que ofrece "recetas útiles para aumentar la riqueza de unos pocos"

Asimismo, el obispo de Roma ha instado a los fieles a no caer en las garras de un populismo que propone “soluciones demasiados fáciles y apresuradas” para erradicar la lacra de la pobreza, pero que realmente proponen “recetas útiles solo para aumentar la riqueza de unos pocos, condenando a los pobres a la marginación”.

Frente al populismo, el Papa propone dar testimonio para “encender luces de esperanza en medio de la oscuridad”. Así las cosas, pide “aprovechar, en las situaciones dramáticas, las ocasiones para testimoniar el Evangelio de la alegría y construir un mundo más fraterno; comprometámonos con valentía por la justicia, la legalidad y la paz, estando del lado de los débiles. No escapemos para defendernos de la historia, sino que luchemos para darle a esta historia un rostro diferente”.

"Cuidemos de los pobres, en quienes está Jesús, que se hizo pobre por nosotros”

El Sucesor de Pedro es consciente que para hacer frente a todo ello es necesario la fuerza que se encuentra en “la confianza en Dios, que es Padre y vela por nosotros. Si le abrimos nuestro corazón, aumentará en nosotros la capacidad de amar. Jesús, en efecto, después de haber hablado de escenarios de violencia y de terror, concluye diciendo, 'Ni siquiera un cabello se les caerá de la cabeza'. Esto nos lo debemos repetir siempre, especialmente en los momentos más dolorosos: Dios es Padre y está a mi lado, me conoce y me ama, vela por mí, no duerme, cuida de mí y con Él ni siquiera un cabello de mi cabeza se perderá. Amados por Él, decidámonos a amar a los hijos más descartados, cuidemos de los pobres, en quienes está Jesús, que se hizo pobre por nosotros”, ha expresado.

En su mensaje final, Francisco hace caer en la cuenta de que no “podemos quedarnos admirando las hermosas piedras del templo, sin reconocer el verdadero templo de Dios, que es el ser humano, especialmente el pobre, en cuyo rostro, en cuya historia, en cuyas heridas está Jesús. Él lo dijo. Nunca lo olvidemos”, recuerda.

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