El paro en España sigue en descenso: ¿pero es el tipo de empleo que promueve el Papa Francisco?

Los datos revelan que 2021 fue un buen año para el empleo para España, mientras que la Fundación FOESSA advierte que la pandemia ha dejado dos millones de hogares en precariedad

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La Encuesta de Población Activa nos ha dejado una buena noticia este jueves, 27 de enero, tras conocer que a lo largo del año 2021 se crearon un total de 840.700 puestos de trabajo, lo que supone el mayor ritmo de creación de empleo desde 2005

Con las cifras sobre la mesa, el número total de ocupados superaron las veinte millones de personas, lo que supone 218 mil afiliados más que en 2019, antes de la pandemia. Se creó empleo en todas las regiones y en todos los sectores, especialmente, en el sector Servicios.

Pese a todo, España sigue contando con más de tres millones de desempleados, entorno al 13%. Pero motivos reales para la euforia no hay, si tenemos en cuenta el informe que la pasada semana emitió la Fundación FOESSA, que revelaba que la pandemia dejaba un panorama sin precedentes en cuanto a la precariedad laboral se refiere.

Según los datos arrojados por FOESSA, durante la crisis sanitaria se ha duplicado la precariedad, dejando a casi dos millones de hogares que dependen económicamente de una persona sustentadora principal que sufre inestabilidad laboral grave, con tres o más meses de desempleo, tres o más contratos diferentes, en tres o más empresas distintas.

Por tanto, ha habido un empeoramiento de las condiciones de trabajo, lo que está generando cada vez más trabajadores pobres, con un salario insuficiente y unas jornadas de trabajo que no superan las tres horas.

Durante la crisis, la situación de que el sustentador del hogar se encuentre en paro de larga duración ha alcanzado a 800 mil familias y el desempleo total familiar, casi se ha duplicado, es decir hay casi dos millones de núcleos familiares donde todas las personas activas están en paro.

Y a pesar del aumento de la protección social no se ha logrado compensar esta situación y un tercio de estos hogares carece de algún tipo de ingreso periódico, predecible, que permita una cierta estabilidad y capacidad de generar proyectos vitales.

El Papa Francisco y el empleo digno

En innumerables ocasiones, el Santo Padre ha denunciado la precariedad en el trabajo, recordando que se trata de un derecho y un deber fundamental de todas las personas. Por ello, ha lamentado en muchos de sus discursos que los trabajadores son demasiadas veces “rehenes de la injusticia social”.

El pasado mes de junio, el obispo de Roma reclamó en un vídeo a la Organización Internacional del Trabajo (dependiente de la ONU) trabajar por “eliminar las desigualdades, de curar la injusticia que está minando la salud de toda la familia humana”.

El Sucesor de Pedro instaba así a las autoridades competentes a que buscasen soluciones para salir de la actual crisis laboral "buscando el bien común", dando prioridad, a la hora de dar respuestas concretas, "a los trabajadores que se encuentran en los márgenes del mundo del trabajo" y que todavía se ven afectados por la pandemia de la covid-19.

La Conferencia Episcopal reclama una reforma laboral que limite la precariedad

El pasado 23 de diciembre, cuando el Gobierno de Pedro Sánchez alcanzó un acuerdo con patronal y sindicatos para la reforma laboral, la Conferencia Episcopal Española emitió un comunicado donde advertía que estaba en juego una legislación laboral para “colaborar a que se respete la dignidad del trabajo y que se realice en condiciones dignas, en definitiva, que el trabajo sea humano”.

Para el episcopado español, lo que debe primar en esta reforma laboral es “la defensa del bien de las personas y del bien común de la sociedad”, así como colaborar “lo más eficazmente posible a eliminar las desigualdades en las relaciones laborales, a acabar con la temporalidad, la precariedad y la inseguridad laboral, a reforzar la negociación colectiva en condiciones justas y eliminar las desigualdades que deterioran las condiciones laborales de muchos trabajadores y trabajadoras”.

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