Los obispos de Ecuador, tras la muerte de varios presos en un enfrentamiento: "¡Cese la violencia!"

El pasado 30 de septiembre, los prisioneros de un centro penitenciario se enfrentaron con armas de fuego. El combate en el interior del centro se saldó con 116 muertos y 80 heridos

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A través de un comunicado, el Consejo Presidencial de la Conferencia Episcopal de Ecuador ha manifestado su pesar por los hechos ocurridos en la prisión de 'El Litoral', donde estalló un enfrentamiento con armas de fuego entre miembros de bandas rivales en el que murieron 116 prisioneros y otros 80 resultaron heridos.

Los hechos han trascendido a nivel nacional en el país sudamericano.Guillermo Lasso, presidente de la república, ha decretado el estado de emergencia en todo el sistema penitenciario por un período de dos meses.



La nota, publicada con el título "¡Cese la violencia!", los obispos ecuatorianos han expresado la necesidad de "tomar conciencia de que el ser humano no es un objeto desechable o descartable, algo que se puede usar y botar. Si somos conscientes de la dignidad de la naturaleza humana, tendremos la certeza de que el corazón de las personas e instituciones no puede corromperse".

Del mismo modo, el episcopado remitió este mismo llamamiento a las autoridades "que tienen la responsabilidad de buscar la paz social como base para el progreso económico", así como a todas las personas, a quienes han exhortado a "valorar la vida humana".

Un llamamiento a construir un país basado en la paz y la solidaridad

En lo referente al gran número de fallecidos durante el fuego cruzado, los obispos han explicado que "cada existencia destruida es un campanazo a nuestras conciencias, para reflexionar sobre qué mundo estamos construyendo, qué sociedad queremos: la de unos enfrentándose a otros o la de la unidad en la búsqueda de un bien para todos, sin dejar a nadie en el camino". En este sentido, han expresado su solidaridad con las víctimas y sus familiares.

También han exhortado a los perpetradores de los asesinatos para que "cesen la violencia y el mercado de la muerte; y que conviertan sus armas en arados y las balas en semillas de vida". Del mismo modo, han invitado a los cristianos de Ecuador a comprometerse en la formación de un país fundamentado en "una cultura de paz, basada en la justicia, el amor, la equidad y la solidaridad".




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