La pregunta que nos hace el Señor en el Evangelio de este domingo: "¿También vosotros os queréis marchar?"

El periodista y sacerdote Josetxo Vera nos da las claves del Evangelio de este domingo, 22 de agosto, en 'Chateando con Dios'

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Las Lecturas de este domingo son especialmente contundentes para este tiempo de verano. Tienen dos preguntas fundamentales que marcan nuestra vida: “¿Vosotros a quien queréis servir?” es la pregunta de la Primera Lectura mientras que en Evangelio se nos pregunta: “¿También vosotros os queréis marchar?”.

Son dos preguntas que están muy relacionadas y nos afectan a nuestra propia vida. La primera está en el contexto del Libro de Josué que había entrado con el Pueblo de Dios en la Tierra Prometida y al final de su vida reúne a los jefes de las tribus, a los sacerdotes, a las familias y les hace una pregunta definitiva, "¿vosotros a quién queréis servir?"

Antes de decirle esto, Josué le ha hecho un relato de toda su historia y les ha ido contando todas las maravillas que Dios ha hecho con ellos. Y añade: “Yo y mi familia serviremos al Señor”. Esa respuesta hace que todo el pueblo de Israel acoja la misma respuesta y diga que también ellos servirán al Señor.

La respuesta que da Josué y el pueblo de Israel es a partir de su propia experiencia, una mirada al pasado. Para nuestra respuesta a esta pregunta tenemos que mirar nuestro pasado, la historia de misericordia que Dios ha hecho con nosotros, cómo Él nos ha hecho hijos suyos, cómo nos ha dado la gracia siempre que ha sido necesitada o nos ha sostenido en los momentos de crisis y nos abre caminos para el futuro.

El compromiso es servir y este verbo es ponerse a los pies del Señor, cumplir su misión y realizar lo que Él nos ha confiado. No es simplemente quedarse quieto en la vida de la Iglesia. La respuesta a esta pregunta es una acción.

Tenemos una segunda pregunta en un momento grave de la vida del Señor con sus apóstoles cuando él les ha dicho que Él es el pan de vida. Algunos discípulos quedaron atónitos ante esta explicación y la vivieron con tanto dolor que dice la Biblia que “muchos se apartaron del Señor”. Él se vuelve triste y habla con Pedro preguntándole si ellos también se querían marchar. Es también una pregunta para nosotros. Nos puede consolar, apoyar y sostener la respuesta de Pedro que le dice al Señor: “A dónde vamos a ir? Solo tú tienes palabras de vida eterna”. Si miramos en nuestro entorno nadie más que el Señor nos habla de un futuro de salvación o una esperanza definitiva. Todo el mundo nos habla de poco tiempo, de cosas que acaban, parece que vivimos en el agobio. Podemos hacer nuestras las palabras de Pedro.

La respuesta de Josué se sostiene mirando a su pasado y la de Pedro se sostiene mirando al futuro. Por tanto, nosotros tenemos que responder con una síntesis entre la de Josué y la de Pedro. Mirando nuestra historia y mirando al futuro. Nos queda ser fieles al Señor. Las Lecturas de este domingo nos anuncian un tiempo de esperanza, de fidelidad, nos piden una mayor entrega a todos nosotros.

Vamos a pensar cómo podemos servir al Señor con el testimonio de nuestra vida, testimonio y palabras.


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