Santoral

San Simón Stock, difusor del Santo Escapulario

Mayo es el mes de la Virgen que nos impulsa a invocar más a nuestra Madre Corredentora y Medianera de todas las Gracias con los cual tiene parte importante en el Misterio Salvador de Dios sobre toda la humanidad. Así lo experimentó desde el corazón San Simón Stock cuya memoria hacemos hoy. Nacido en Aylesford (Inglaterra) hacia 1165 es uno de los pilares más importantes de la revitalización del Carmelo.

Su bigrafo y amigo es el dominico Gerardo de Frascheto que se refiere a él en su escritos, llamándole el amigo Simón. No obstante algunos estudiosos piensan que no necesariamente se trata de este hombre. Sí que se pone en su haber el amor a la Reina de los Cielos porque en el seno materno su madre que era muy devota de la Virgen le consagró a Ella siguiendo al pie de la letra aquello del Antiguo Testamento “antes de formarte en el vientre te escogí y te formé”.

Él mismo en su adolescencia hizo la opción por la vida eremítica porque se refugió en un tronco de roble abierto de grandes dimensiones. Precisamente su apellido Stock en inglés significa “tronco”. Casualmente este acercamiento a los ermitaños se perfila en los carmelitas de vida de silencio en sus inicios. Elegido Superior General de la Congregación, se le aparecerá la Virgen con el Santo Escapulario. La promesa es que quien lo lleve debidamente será librado del Infierno y alcanzará las alegrías del Cielo.

El segundo privilegio es que quien muriese merecedor del Purgatorio y hubiese llevado su Escapulario, Ella bajaría a sacarle el sábado siguiente a su muerte. En el Capítulo de Aylesford, fue nombrado General, impulsando la estructura y formación de lo que es el Monte Carmelo, tal y como ha llegado a nuestros días. En su amor a la Virgen compuso varios himnos en su honor. San Simón Stock muere en Burdeos hacia el año 1265.

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