Santoral

Santos Marcelino y Pedro

Constantino mandó edificar una Iglesia sobre sus tumbas y Gregorio IV se lo entregó a Carlomagno, para que fuesen venerados

La proyección del Misterio Trinitario en la Historia de la Salvación ha sido tan inmensa que muchos ha experimentado el Amor de Dios hasta dar al vida por Él. Es el caso de los Santos Marcelino y Pedro, cuya conmemoración hacemos hoy. Ambos se recuerdan en el Canon Romano de la Misa. El primero era sacerdote y ejerció el Ministerio presbiteral durante el mandato del emperador Diocleciano. Por su parte, Pedro era exorcista, dedicándose a curar a los poseídos por el demonio.

Durante una redada fueron detenidos por profesar la Fe en Jesucristo, arrojándoles a la cárcel. Su estancia en la prisión fue similar a la que cuenta sobre Pablo y Silas cautivos, en los Hechos de los Apóstoles. Continuamente alababan al Dios del Cielo, dando verdadero ejemplo a los demás prisioneros, alentando a los fieles y catequizando a los que estaban inmersos en el paganismo.

El santoral de hoy, miércoles 2 de junio

Pero más pronto que tarde se les descubrió en su forma d eproceder en la cárcel y, de inmediato, se les ajustició por orden del magistrado Severo quien, ordenó que fuesen conducidos a un bosque llamado Selva Negra para que nadie supiese del lugar donde iban a ser sepultados, después de decapitarles. A pesar de toda esta maquinación, los planes de la Providencia discurrían por ese camino para sacarlo todo según su designio.

Su forma de morir y su testimonio, estimularon al verdugo a convertirse al Dios de Jesucristo. Y el sitio fue descubierto hasta el punto de que dos piadosas mujeres, exhumaron los restos, llevándoles a la Catacumba de San Tiburcio, en la Vía Labicana, donde reposan hasta nuestros días. Constantino mandó edificar una Iglesia sobre sus tumbas y Gregorio IV se lo entregó a Carlomagno, para que fuesen venerados.

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