Un día después de la conmoción con la que vivimos el devastador incendio de la catedral de Notre Dame, la mejor noticia es que la estructura del monumento no esta muy resentida, según los primeros análisis, pero los técnicos admiten que algunas partes son vulnerables como la bóveda que está afectada lógicamente por la intensidad del fuego en la cubierta y la caída de la aguja. Los daños son graves pero Nuestra señora de París resurgirá de sus cenizas.

Nos tranquiliza y consuela la ola de solidaridad y conmoción que en todo el mundo , cristiano o no, ha generado el suceso. Es significativo en ese sentido que tantas y tantas personas alejadas de la fe cristiana hayan reconocido en Notre Dame ,ante la posibilidad de que hubiera desparecido pasto de la llamas, un signo de lo que representa cultural y espiritualmente para Europa.

Por ello la dimensión de la tragedia de Nuestra señora de París es religiosa pero también humana, cultural y histórica. En Notre Dame y en todas las catedrales europeas redescubrimos las razones de la tradición humanista, ilustrada y cristiana de Europa. Hoy más que nunca tras el devastador incendio de Nuestra señora de París reforzamos el valor y la importancia histórica cultural y religiosa de nuestras catedrales, Burgos, León, Santiago, Barcelona, Zaragoza ,Zamora, Toledo Valladolid, Palencia, Soria, Ávila, Burgo de Osma, Sevilla, Jaén, Avila, Córdoba, Siguenza,Vitoria ,Cuenca, Murcia, etc. Y nos obliga a ser mas vigilantes para garantizar su integridad y seguridad. En París se investigan el origen y la causa del incendio.

La fiscalía apunta a un accidente relacionado con los trabajos de rehabilitación que se estaban haciendo en la cubierta y en la aguja que cayó envuelta en llamas sobre la techumbre. Se evalúan los daños en el continente y en el contenido catedralicio. Se han salvado los tesoros más importantes y relevantes desde un punto de vista histórico, religioso y artístico pero esperamos con interés el informe definitivo con todos los detalles sobre la génesis de la tragedia y los protocolos de actuación que a partir de ahora debieran seguirse para evitar el mayor daño posible en siniestros como el de Notre Dame. La eficaz actuación de los bomberos de París es ya un ejemplo.