Los talibanes han apartado las imágenes bizarras que nos han estado acompañando los últimos días. Se acabaron los columpios, las colchonetas y los coches de choque; saltan a escena las amenazas y los rifles de asalto que tan fielmente acompañan a los talibanes durante los últimos días y las últimas semanas.

Joe Biden vuelve a tragar saliva, una vez más, ante las últimas amenazas del bando talibán; da la impresión de que la ferocidad del ejército norteamericano, que lleva apagándose desde el mes de abril en suelo afgano, está a punto de consumirse del todo, y dejar en duda la fortaleza armamentística de los Estados Unidos, quién lo diría...

Sea como fuere, la toma de bando del ejército talibán en Afganistán es una realidad, y lo único que se quieren en estos momentos es terminar cuanto antes, dar un nuevo golpe en la mesa, y amenazar a la armada norteamericana para que abandone el país antes de que el mes de agosto finalice, advirtiendo de que si no se cumple, "habrá consecuencias".

Sin embargo, resta poco más de una semana para que la fecha límite expire, y desde la Casa Blanca, ven con cierta dificultad que "se puedan completar esos plazos con éxito". De hecho, creen que hay altas probabilidades de que ese objetivo no se cumpla. El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, mantiene el firme pensamiento de abandonar Afganistán, pero el cruce de intereses llega también por parte de los aliados, que consideran más indicado mantener aunque sea una "mínima presencia" de soldados de la OTAN, para velar de alguna manera por la población afgana.

La evacuación de civiles y aliados: prioridad principal

En la última quincena, las tropas aliadas han sacado de Afganistán a un total de 28.000 personas del Aeropuerto Internacional de Kabul. Países como España llevan a buen ritmo la repatriación de todos los aliados de nuestro país, pero otros como Gran Bretaña piden algo más de tiempo para sacar a sus representantes de manera "más segura", en un escenario en el que el caos y el pánico se repite cada día. De hecho, media docena de aerolíneas estadounidenses, han prestado su ayuda para tratar de evacuar lo más rápido posible, con una orden emitida desde el Pentágono.

Ese caos y esos constantes problemas y desórdenes para sacar a la mayor cantidad de población, es el mayor de los temores que ahora mismo se tiene desde el bando norteamericano. Una imagen de dominio y sometimiento por parte de los talibanes, acabaría de culminar la absoluta imagen de derrota para los Estados Unidos, y dejar la imagen de Joe Biden como protagonista del mayor desastre militar del país en el siglo XXI.