En esta semana marcada por la decisión del Tribunal Constitucional, que eleva el aborto a la categoría de derecho y deja al margen la protección hasta ahora reconocida a los bebés por nacer, hay organizaciones como Más Vida que luchan por promover la maternidad y ayudar a las madres vulnerables con iniciativas como su última campaña bajo el título “Ser madre es la leche”.

Hasta el 29 de mayo en su página web es posible colaborar comprando leche en polvo para bebés que destinarán a las organizaciones que apoyan a las mujeres embarazadas y madres con escasos recursos económicos.

“Más que por aprobar leyes para penalizar o despenalizar el aborto o para hacerlo más o menos libres, lo que nosotros abogamos por una Ley de Apoyo a la maternidad con ayudas reales y efectivas y con suficiente dotación presupuestaria”, señala Álvaro Ortega al frente de la Fundación +Vida quien lamenta que en España el conjunto de las administraciones destine menos de 3 millones de euros a políticas de maternidad.

El caso de Paloma Martínez

Paloma Martínez Monasterio, más conocida en redes como Paloma Babybe es la madrina de esta campaña. Tiene 7 hijos y más de 100.000 seguidores en Instagram siguen su aventura familiar.

“Creo que ser madre es la leche porque realmente es un regalo, un regalo que te da la vida que te hace ser mejor persona, una gran aventura y como en cada aventura a veces hay momentos complicados y difíciles y otros increíbles que compensan todo lo malo” señala Paloma.

Sus hijos tienen entre 11 y dos años y en su segundo parto nacieron trillizos: “mi primer hijo cambió muchas cosas, entonces yo era más perfeccionista y me agobiaba más. Con 7 hijos vas aprendiendo y aprendes a relativizar. No hay que tener miedo ni querer ser perfecto. La maternidad yo creo que es imperfecta, vas creciendo con tu hijo, aprendiendo de los problemas que vas solventando y de los logros que obtienes. Al final eres mejor persona”, afirma Paloma.

A su juicio, las claves del éxito en una familia numerosa son: la organización y fomentar al máximo la autonomía de cada hijo, que el padre y la madre sean un equipo, tener sentido del humor cuando las cosas no salen según lo previsto. Trata de estar alegre o al menos sonriente en cada momento y cuando no llega apela “al de arriba para que les ayude”.

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Admite que ser madre es difícil tanto desde el punto de vista económico, por los gastos que implica la crianza y la educación de los hijos como por la entrega que requiere. También hay obstáculos en el ámbito laboral que hacen que para muchas madres y muchos padres sea realmente complicado conciliar su vida familiar y profesional. Y todo sin contar con el cansancio que implica muchas veces educar y el miedo a que les pueda pasar algo a los hijos.

“Todo compensa cuando tu hijo, te mira, te abraza o te cuenta por la noche sus historias y confidencias” concluye Paloma, que considera que la maternidad "te hace conocer el amor incondicional".