La mañana del Jueves Santo la ciudad de Cádiz tiene una cita en lo más alto del barrio de Santa María. Allí, Jesús Nazareno aguarda cada año entronado en su paso esperando a repartir devoción por las calles gaditanas junto a su madre, la Virgen de los Dolores.

Una salida procesional de la que partirá el Regidor Perpetuo con su tradicional bastón de mando que, ocho años después, ha vuelto a imponer quién debe hacerlo, el alcalde electo de la ciudad, en esta ocasión Bruno García.

Un acto que en los últimos ocho años se había dejado de lado por el anterior alcalde, José María González 'Kichi', que acudía el Jueves Santo a Santa María pero se negaba a imponer el bastón de mando, aunque por la noche saliera tras los pasos de Jesús Nazareno junto a su madre. Este año, con el cambio de gobierno se ha recuperado una tradición que no se llevaba a cabo desde 2015 y que trasciende todo lo religoso y devocional, pues al final Jesús Nazareno es la gran devoción y pasión de Cádiz.

Con muchas autoridades civiles y militares, y presidido por Monseñor Rafael Zornoza, obispo de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, el hermano mayor de la cofradía, Jacinto Plaza ha recordado que «siempre hemos respetado la decisión del anterior alcalde pero la compartíamos. La cofradía siempre ha entendido que esta tradición se debía recuperar porque hablamos de la gran devoción de todos los gaditanos, del alcalde perpetuo de Cádiz».

En Carrera Oficial hablamos también con el imaginero Luis González Rey. Sus imagenes se estrenan esta madrugada con la cofradía de El Perdón.