Recordarás que hace algunas fechas descubrimos el aquafaba, ese caldillo que conserva las legumbres cocidas en los típicos tarros de cristal y que, hasta entonces, acababa sus días por el sesagüe del fregadero. Ese líquido, el aquafaba, no es otra cosa que el agua en el que se han cocido los garbanzos, o las alubias y que casi todos estamos empeñados en que no sirve para nada. ¡Qué equivocados estamos!

Si te sumerges en la red descubrirás la cantidad de ricas recetas que puedes elaborar con el aquafaba o el “caldillo” del bote de garbanzos o habichelas. Fue el chef francés Joël Roessel el que a base de investigar con el agua de las judías enlatadas y otras legumbres el que llegó a la conclusión de que ese líquido tenía una textura similar a la clara de huevo, por lo que se planteó usarla para formar espumas y “et voila”. El agüilla de las legumbres se convierte en un bocado gourmet.

Y es que el aquafaba contiene hidratos de carbono, proteínas y sustancias vegetales que durante el proceso de cocción pasan a formar parte del agua, otorgándole unas increibles propiedades espumantes, emulsionantes, aglutinantes y gelatinizantes, convirtiéndose en un ingrediente muy usado en la cocina vegetariana y vegana, sobre todo en reemplazo de en alergias al huevo.

Como te decía, si te das una vuelta por el internet más gastronómico, te sorprenderás de las recetas que puedes elaborar con ese caldillo. Crema batida, merengue, crema pastelera, mousse, mayonesa, galletas, pan, crepes .. aunque te sorprenda el recetario es rico y tan amplio como puedas imaginar.

Hoy te vamos a enseñar como se hace un delicioso merengue con el agua de un bote de garbanzos y un par de ingredientes más. ! ¡Alucinante! Toma nota.

Ingredientes

• 150 ml de aquafaba
• 100 gr de azúcar
• 1 cucharada de extracto de vainilla

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Así se hace

Ponemos en el vaso de la batidora el aquafaba de un bote de garbanzos y empezamos a batir amáxima potencia. Debes de tener en cuenta que el aquafaba tarda más en montar que la clara de huevo por lo que tendrán que pasar unos cuatro o cinco minutos para que empiece a blanquear. Justo en el momento que el aquafaba comience a blanquear le vamos a poner el extracto de vainilla, añadimos poco a poco el azúcar en pequeñas cantidades con pequeños intervalos de tiempo entre cucharada y cucharada de azúcar.

Seguimos batiendo a máxima potencia hasta que nuestro merengue vegano haya montado y tenga el punto de espesor deseado. Ya solo nos queda utilizarlo como más nos guste. Podemos hornearlo en pequeñas porciones, rellenar un bizcocho, decorar una tarta...

Ya sabes. ¡No se te ocurra tirar más el agua de un bote de garbanzos!

¡Ea, salud!