La consejera de Cultura, Turismo, Jóvenes y Deportes de la Junta de Extremadura Victoria Bazaga, ha visitado en la mañana de hoy la iglesia de San Martín de Plasencia, un referente dentro del patrimonio diocesano de Plasencia ya que cuenta con el retablo del Divino Morales.

Le han acompañado el obispo de la diócesis de Plasencia, Monseñor Brotóns Tena; la directora general de Bibliotecas, Archivos y Patrimonio Cultural, Adela Rueda Márquez de la Plata, el alcalde de Plasencia, Fernando Pizarro; miembros de la Delegación Diocesana de Patrimonio; el jefe de servicio de Obras y Proyectos de la Secretaría General de la Consejería de Cultura, Juan Antonio Vera y el director del Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de la Junta, Javier Cano, además de las empresas implicadas en las obras de restauración.

Dicha Iglesia sufrió un incendio en el verano de 2020, que afectaba de manera muy importante al retablo mayor de la iglesia, el retablo de Luis de Morales.

Ha sido un proceso de restauración minucioso y delicado, ha apuntado la consejer ; “Ya estamos en la recta final, ya queda muy poquito tiempo, pero en este trabajo no se pueden dar unas fechas muy concretas, porque son trabajos muy delicados y pueden retrasarse un poquito y tardar más o menos de lo que teníamos previsto, pero anunciaremos el momento en que esté. Los trabajos, como decía antes, han sido muy delicados, muy importantes”

Bazaga ha subrayado que la inversión ha estado en torno a los 485.000 euros y que la idea es que San Martin vuelva a ser lo que era.

Por su parte el obispo de la diócesis de Plasencia Don Ernesto Brotóns Tena ha subrayado; “Cuidar nuestro patrimonio cultural, que es muy rico, es cuidar de nuestra identidad, de nuestras raíces y de lo que nos constituye y nos hace pueblo”

Fernando Pizarro, alcalde de Plasencia ha destacado en la visita a San Martin que el trabajo ha sido posible gracias al acuerdo entre las diferentes administraciones Junta de Extremadura , Obispado de Plasencia , la Diputación Provincial de Cáceres y el Ayuntamiento de Plasencia, que se ha retrasado en el tiempo, pero que ha merecido la pena.