El cáncer es una de las principales causas de muerte en el mundo, una enfermedad que tiene que ver con los errores genéticos derivados de la renovación celular. Por estadística, lo normal es que los animales con más células sean los más afectados, aunque hay una especie que se libra, esta es la de los elefantes. Y es que este es un dato que llama la atención ya que, los científicos, llevan mucho tiempo fascinados buscando una razón lógica a su capacidad para no tener cáncer y, ahora, parece que la han encontrado.

Un dato importante es el de su mortalidad. Mientras que en una persona es de un 25%, en los elefantes no llega al 5%. Tal y como explicaba en los micrófonos de 'La Linterna' Jorge Alcalde, divulgador científico, se ha descubierto un gen responsable de esta causa, el P53, "el guardián del genoma", cuya función es impedir que las copias del ADN que se producen cuando una célula se divide, se cometa una errata. "Para que el cáncer no se produzca, esta copia, tiene que ser exacta", apuntaba.

Al parecer, nosotros tan solo tenemos una copia; los elefantes, 20. Además, sus mecanismos las hacen mejor, "algo difícil". Esos correctores que evitan estos defectos, "están especialmente desarrollados en el organismo del elefante", comentaba Alcalde. Pero, ¿se aprende algo con ello? De lo que nos damos cuenta es de que "la ciencia básica todavía no tiene una aplicación concreta", aunque luego puede convertirse, quien sabe si gracias a las terapias genéticas o a las futuras combinaciones de tecnologías.

"Todo esto lo observamos en los animales y en las plantas", iba finalizando. Y es que, la mayoría de los medicamente utilizados en nuestro día a día, han surgido gracias a la naturaleza como podría ser el caso de la rata topo, una especie africana también inmune a esta enfermedad y que "puede ofrecer muy buenos resultados para los medicamentos contra el envejecimiento", concretaba Jorge Alcalde.